Las maravillas que estamos descubriendo con el James Webb nos están maravillando. El telescopio espacial está llevando a que los astrónomos y científicos se queden alucinados con todo lo que hay en el universo que todavía no ha sido explorado. Y, en este caso, esta ha sido la herramienta que ha ayudado a resolver el misterio de un extraño planeta que ha sido detectado con una forma especialmente hinchada que ha provocado la sorpresa entre todos los especialistas. ¿Qué es lo que provoca que el planeta tenga ese tipo de aspecto?

Un proyecto de grandes descubrimientos

Gracias a los datos proporcionados por el James Webb, los astrónomos han llegado a descubrir que, para justificar la forma de este tipo de planeta, no hay que recurrir a teorías demasiado complejas. Así, se ha descubierto que el motivo es que la reserva de metano del planeta es muy inferior a la habitual. Esta se valora ya como la posible explicación del misterio, descubriéndose que la atmósfera del planeta se puede inflar de una manera extremadamente curiosa como ha ocurrido en este caso.

El planeta en cuestión del que se está hablando es WASP-107 b, el cual fue descubierto en el año 2017 como parte de los hallazgos del consorcio WASP (Wide Angle Search for Planets). Se encuentra a una distancia de 200 años luz de la Tierra y, como dato curioso, tenemos que decirte que está en una constelación que seguro que conoces de sobras: Virgo.

¿Cuál es la respuesta al misterio?

Los datos que se han obtenido desvelan que nos encontramos ante uno de los planetas más ligeros de fuera del Sistema Solar. Entre los más de 5.000 planetas extrasolares que se han descubierto y analizado, este es uno de los que tiene un peso inferior, uno equivalente a una cantidad de solo 30 Tierras. En especial, lo que hacen los científicos es realizar una comparación entre WASP-107 b y el gigante gaseoso que es Júpiter. Si bien el exoplaneta tiene casi dos veces el tamaño de Júpiter, sorprende que su peso solo sea de un 12% el de este.

Hay una diferencia de volumen tan extrema que si bien Júpiter ocupa unas 318 veces la masa de la Tierra, WASP-107 b solo pesa, como decíamos, 30. Eso es lo que provoca que tenga una de las estructuras más mullidas y algodonosas que se hayan llegado a ver en el universo. Lo que hacen los científicos es compararlo con un algodón de azúcar que hayas preparado en el microondas (aunque la comparación es difícil de imaginar si no estamos habituados a este tipo de dulce).

Como no se trata de un planeta nuevo, los científicos han tenido tiempo de sobras para analizarlo e intentar encontrar la explicación a lo que está ocurriendo. Se habían valorado distintas teorías, como que el planeta estaba formado por una capa rocosa en la que se escondía una enorme cantidad de helio. Pero se han ido llegando a teorías válidas que han descartado cada una de las ideas propuestas con anterioridad. La respuesta, al menos aparentemente, puesto que es difícil darla por definitiva, ha sido obtenida por dos equipos de astrónomos combinando los nuevos datos del James Webb y la información que tenían con anterioridad.

Como decíamos antes, el motivo de su forma y bajo peso es la escasa cantidad de metano que hay en el planeta. Y ahora viene lo importante, puesto que se ha descubierto que el interior del planeta es mucho más caluroso de lo que se habría imaginado en un principio. Esa temperatura estaría provocando que el metano reaccionase y se mezclase con las capas frías generando ese efecto que le da al planeta su curiosa forma.

Ahora bien, esta teoría necesita una explicación adicional que detalle el motivo por el cual es un planeta con un interior de tan alta temperatura. Dicen que la respuesta a esto se encuentra en el proceso de órbita que tiene el planeta alrededor de su estrella. No solo se lleva a cabo en un periodo de solo 5,7 días, sino que, además, no traza un círculo perfecto. Esa forma en la que la estrella interactúa con el planeta y lo tiene en constante impacto y movimiento, estaría generando la interacción del metano y su reacción. Para que lo entendamos mejor, lo comparan con el efecto de las mareas que provoca la Luna en la Tierra.

Por lo que parece, ese efecto en la órbita y las consecuencias de ello, llevan a que el metano acabe destruido y que, en su lugar, se produzca una enorme cantidad de monóxido y dióxido de carbono. A partir de ahí se ha llegado a entender que el curioso diseño de cola que tiene el planeta es fruto de cómo el aire de la masa atmosférica de WASP-107 b se está perdiendo. Eso genera que vaya apareciendo esa cola en un proceso, aunque lento, constante. Los astrónomos se han mostrado fascinados por esto en el pasado y ahora es algo a lo que, al menos, han podido dar cierta explicación.

Para los científicos, este exoplaneta es uno de los más curiosos e interesantes que puedan haber llegado a estudiar. Junto a todo lo dicho con anterioridad, también les ha impresionado que se produzcan fenómenos tan curiosos como lluvias de arena. Sin duda, es un reflejo claro de la majestuosidad de los misterios que todavía tiene el universo y que cada vez vamos descubriendo más fuera de nuestro Sistema Solar.

 

Fuente: Space | adslzone