En ocasiones es mejor no llegar a profundizar en los misterios del universo, dado que se pueden descubrir cosas que quizá no te interese ver. Pero la astronomía y la ciencia nos apasionan y nos empujan a intentar saber más y más acerca de lo que el universo esconde. Buena prueba de ello es que, aunque nos habían avisado, no nos hemos podido resistir a bucear dentro de este mapa de agujeros negros.

Más de 1 millón de agujeros negros

Como puedes ver en The Astrophysical Journal, el trabajo que ha realizado el equipo de científicos al frente de este proyecto ha sido titánico. Han llevado a cabo la colocación en el mapa de 1,3 millones de agujeros negros de los que se ha encontrado registro, utilizando para ello tanto información de espacio como de tiempo. Esto significa que, en el mapa, se pueden encontrar agujeros negros cuyo origen se remonta a miles de millones de años atrás. En ese aspecto, no se puede negar que se trata de un trabajo fascinante.

Lo que resulta tan aterrador, aunque desde un punto de vista científico, es la manera en la que el mapa nos ayuda a ser conscientes de cómo el universo está plagado e incluso dominado por esos agujeros negros. Están por todas partes, rodean el cosmos y, en cierta manera, nos hacen sentir pequeños. Tampoco hay que dejar de lado que no todos esos agujeros negros están atribuidos a una galaxia, sino que hay muchos que están libres de una manera que resulta aún más preocupante.

Entendiendo mejor el mapa

Si has visto el vídeo (lo puedes ver un poco más abajo en el embed de X) quizá tampoco te haya quedado muy claro qué es lo que estás viendo. Ten en cuenta que el centro de esa esfera es donde se coloca nuestro punto de vista. A su alrededor es donde están los agujeros negros, o más exactamente los cuásares. Las zonas más rojas implican que los cuásares están más lejos, mientras que la parte donde no se puede ver ninguno es aquella en la que nuestra visión se encuentra bloqueada por la galaxia.

En el caso de analizar cada uno de los cuásares podríamos descubrir datos como que el más lejano date del momento en el que el universo todavía era muy joven: solo 1,5 mil millones de años. Pero solo es un pequeño dato procedente de un enorme archivo que, según confirman, es el más grande que se haya utilizado para este tipo de trabajo. Además, nunca se había llegado a crear una simulación 3D que permitiera ver el mapa de una manera tan visual.

Curiosamente, para llevar a cabo este proyecto se ha recurrido al ingenio. El motivo de ello es que los responsables del proyecto han utilizado la investigación y los datos captados a lo largo de los años por el telescopio espacial Gaia de la Agencia Espacial Europea. Pero hay que entender que la misión de este telescopio no es analizar cuásares, sino que se ocupa de trazar los mapas de todas las estrellas de la galaxia. No obstante, en este proceso también capta las señales de los agujeros negros, y es ahí donde entra en juego el trabajo realizado con este estudio.

A su favor tuvieron que los cuásares generan un brillo espectacular, lo que ayuda a su detección y ubicación. Una vez consiguieron todos los datos de los agujeros negros obtenidos por Gaia, lo que hicieron en el proyecto fue cruzarlos con longitudes de onda de infrarrojos para llevar a cabo su análisis. Así descubrieron todos los agujeros negros y sus posiciones, así que fueron colocándolos dentro del mapa. Como te indicamos, son 1,3 millones de agujeros, por lo que se trata de un trabajo que ha impactado de forma contundente en el sector astronómico.

Como las galaxias donde hay agujeros negros tienen grandes cantidades de materia oscura, esto permitirá que se pueda estudiar mejor este elemento del cosmos. Los resultados proporcionados en este mapa también serán útiles para continuar explorando la forma en la que el universo se ha ido expandiendo a lo largo del paso del tiempo. Es, en definitiva, un gran trabajo al que hay que seguir la pista y el cual seguro que abre nuevas vías de investigación.

 

Fuente: Simons Foundation | adslzone