Esta misión privada de la empresa Axiom Space ayuda a seguir marcando un antes y un después en lo que se refiere a la exploración del espacio. Los miembros de la tripulación, cuatro astronautas a los que se ha visto pletóricos por el regreso al planeta, han pasado 18 días en el exterior. Durante este periodo de tiempo han estado trabajando en el laboratorio orbital, donde a buen seguro han llevado a cabo importantes investigaciones.

Una misión histórica

El aspecto más importante de la misión Ax-3 se encuentra en que se trata de la primera vez en la que se lleva a cabo una de estas características contando con una tripulación europea. Los cuatro integrantes de la misión han sido el español Miguel Eladio López-Alegría, Marcus Wandt, Walter Villadei y Alper Gezeravci. Han viajado en la nave Dragon de la empresa SpaceX, la cual ha llevado a cabo un viaje de retorno de casi 50 horas.

El proceso de retorno ha sido emocionante y se ha podido seguir minuto a minuto con tanta emoción que seguro que inspira a alguna futura película del espacio de HBO o Netflix. El viaje de retorno comenzó el día 7, momento en el cual se desprendieron del enlace que tenían en la Estación Espacial Internacional. La intención era, tal y como ha acabado ocurriendo, aterrizar en el Atlántico, cerca de la región de Florida, en Estados Unidos.

La llegada a la Tierra paso a paso

Todo el proceso de aterrizaje avanzó sin incidencias. Para ello, inicialmente se produjo un retraso en la misión de retorno debido a que las condiciones en Florida no eran las adecuadas y existía cierta preocupación sobre lo que ocurriría en el momento en el que la cápsula fuera a caer al agua. Casi a las dos del mediodía de España, la nave se preparaba para hacer la quema de desorbitación que prepararía la nave a la hora de entrar en la atmósfera. Tras eso solo necesitarían unos 30-35 minutos para caer hasta el agua en un momento que ha sido muy celebrado por la facilidad y seguridad con la que se ha llevado a cabo la recuperación.

Cuando la cápsula se encontraba a una altura de 5.700 metros, se desplegó el paracaídas principal. Después, en el momento en el que ya se encontraba a una altura de 2.000 metros, se llevó a cabo el despliegue de cuatro paracaídas adicionales. A las 14:30 horas ya había tocado el agua y se puso en marcha el proceso de recuperación de la cápsula, tras lo cual se han activado las medidas obligatorias antes de abrirla y de darle la bienvenida a los cuatro astronautas.

Tras salir de la cápsula, los astronautas se han mostrado contentos y satisfechos, ilusionados por el regreso posando para sus primeras fotos después de haber estado tantos días fuera del planeta. Ahora están preparados para el reconocimiento médico obligatorio con la intención, después, de que un helicóptero les lleve a tierra a fin de que puedan recuperarse después de un viaje largo y, en cierto modo, complejo. No hay que olvidar que más allá de llevar los particulares y avanzados trajes de astronauta, los miembros de esta misión han contado con un espacio realmente limitado. La nave Dragon tiene una forma estilizada para que sus viajes sean exitosos, pero que deja a los astronautas con menos espacio del que se podría llegar a imaginar.

No obstante, es un pequeño precio a pagar para hacer historia y aportar a la humanidad unos progresos científicos de gran valor. En el espacio, estos cuatro astronautas han realizado investigaciones relacionadas con el cáncer, con las células madre y con otro tipo de proyectos también de alta trascendencia. Hicieron decenas de experimentos en microgravedad e incluso probaron un perro robot que podría ser clave para la exploración de planetas como Marte. Asimismo, también han sido responsables de explorar la órbita terrestre baja, lo que será clave para futuras misiones y en proyectos tan ambiciosos como la futura colonización de la Luna.

 

Fuente: adslzone