Por supuesto, cruzamos los dedos para que no pase. Pero si llega a ocurrir una desgracia de dimensiones apocalípticas, lo mejor sería estar preparados. Ya sea el Sol, los extraterrestres o cualquier otro tipo de problema, hay una serie de cosas en las que sería necesario poner la mirada primero.
Tus documentos a mano
Una evacuación se vive de forma mucho más extrema de lo que puedas imaginar. Incluso en las películas todo se ralentiza más de la cuenta para que los personajes puedan representar la tensión que están viviendo en pantalla. Pero en el mundo real todo es cuestión de minutos. Si se produce una evacuación, cuanto más rápido seas, más posibilidades tendrás de ponerte a salvo tanto tú como tu familia. Por ello, no puedes perder tiempo entreteniéndote con cosas. Y eso significa tener a mano, lo primero, todos los documentos importantes.
En países donde están acostumbrados a tener incidentes que pueden ser dramáticos, las familias siempre tienen a mano una bolsa-mochila o similar con todos los documentos. La preocupación por si pasa algo de imprevisto lleva a que esta bolsita se lleve en todo momento cada vez que se sale de casa, hasta si no hay aviso de riesgo. El principal motivo es que nunca sabes qué va a ocurrir y qué vas a tener que hacer. Quizá no tengas la oportunidad de ir a tu casa, así que tener esos documentos contigo será fundamental.
En ese grupo de documentos debes incluir los pasaportes, copias del DNI, de las tarjetas de la Seguridad Social, del carné de conducir, el seguro, y todos los números que correspondan a tus tarjetas bancarias. Si la mochila o bolsa en la que puedes almacenarlo todo es resistente al agua, será algo que te garantizará mucha más seguridad. También es recomendable que guardes ahí las partidas de nacimiento, el certificado de boda o cualquier otro documento que pudiera ser crucial si te encontrases en una situación de este tipo.
Haz una copia de todo en la nube
Incluso con la mejor de las preparaciones puede ocurrir algo que lleve a que no tengas acceso a los documentos que habías reunido. Por eso, es fundamental que tengas un plan B. Lo mejor, en estos tiempos, es que confíes en la nube. Puedes almacenar una copia digital de todos los archivos en la nube y así acceder a ellos en cualquier momento disponiendo simplemente de un dispositivo y conexión a Internet.
Es recomendable, eso sí, que selecciones un servicio en nube en el que puedas confiar. No vas a necesitar mucho espacio, puesto que los documentos no ocupan mucho. Por lo tanto, puedes recurrir al almacenamiento gratuito que te aporta Google Drive. Recuerda que no debes perder tu nombre de usuario y contraseña, ya que serán imprescindibles para poder acceder a los archivos.
Prepara un kit de emergencia
Hay una gran diferencia entre el kit que ya tienes listo con los documentos y el kit que necesitarás para poder enfrentarte a una situación de emergencia. Este debería contar con herramientas que te pudieran ayudar en un momento crítico. Por ejemplo, necesitarás linterna, algunos botellines de agua, una navaja multiusos, un botiquín para primeros auxilios, una brújula y también te vendrá bien un silbato.
No pienses en que muchas de estas herramientas no las necesitarías usando tu móvil, porque en momentos críticos es posible que no lo puedas utilizar. Además, piensa en las condiciones específicas de las personas de tu familia, como si hay alguien que necesite una medicación concreta o ciertos cuidados. En el kit no estaría de más que también pusieras paquetes de comida no perecedera o latas y envases que tengan una fecha de caducidad muy larga.
Haz un inventario de tu casa
Si tienes vivienda y está asegurada, resultará importante que hagas un inventario de todas tus pertenencias. Eso te ayudará a, si ocurre algo problemático, tengas más facilidad para hacer una reclamación al seguro. No tienes que incluir hasta el más mínimo elemento que tengas en casa, pero sí todo lo valioso.
Hay varias formas de hacer inventario, tanto en forma de lista de la manera tradicional como a través de una galería de fotos con tu teléfono. Algunas personas se complican mucho más y hacen una tabla de Excel llena de información que luego puede acabar ayudando a que el seguro te proporcione más margen de posibilidades de conseguir una compensación. Pero, si no quieres, no hace falta que te líes tanto con este aspecto.
Ten un plan de comunicación listo
El plan de comunicación tendrá en cuenta el tipo de situación en el que te quedarás sin poder acceder a tu móvil. Es conveniente que tengas una lista de números de emergencia, de contactos de la familia y de otro tipo de números que te podrían ayudar, como la Policía o la Cruz Roja de tu ciudad.
Un teléfono satélite sería lo ideal, pero no es fácil acceder a ello. Una buena idea podría ser tener un teléfono de prepago que no sea un smartphone, sino un dispositivo más simple y que se caracterice por su resistencia.
Prepara un lugar de apoyo
Esto es algo que posiblemente solo aquellas personas que viven en un lugar expuesto a peligro llevarán a cabo. Pero si te obsesiona que pueda producirse un apocalipsis, no sería una mala idea que también lo tuvieras en cuenta. Se trata de disponer de un lugar de apoyo en el que puedas tener algunas herramientas y un kit de supervivencia más complejo que te ayude en momentos muy críticos.
Por ejemplo, puedes optar por un trastero que tenga acceso abierto las 24 horas. No tiene que ser muy grande, aunque quizá te apetezca aprovecharlo como forma de almacenar ropa de fuera de temporada y usarlo, al mismo tiempo, de soporte para una situación crítica. Aquí es donde puedes tener una mayor cantidad de agua, de comida, de recursos de higiene y otro tipo de útiles en los que confiar.
Así, si puedes, te vendrá bien con la intención de guardar prendas de ropa para toda la familia, una pequeña cocina que funcione con gas o un sistema de purificación de agua, como algunas ideas. Dicen los científicos, al menos algunos, que el fin del planeta Tierra no se producirá hasta dentro de miles de años, pero hay otros especialistas que amenazan con que podría ocurrir mucho antes. No obstante, todo lo que te hemos contado no solo te serviría en un apocalipsis, sino que también te ayudaría a ponerte a salvo en caso de que se produzca, por ejemplo, un terremoto de gran intensidad.
Fuente: adslzone
