Pelarte después de haber tomado mucho el sol puede ocurrir tanto de forma natural a medida que se acaba el verano como si has estado muy expuesto y tu piel se ha terminado quemando. El segundo de los casos es fácil evitarlo, pero el primero es común que nos ocurra a todos. El truco está en retrasar ese momento. Los consejos que te damos a continuación están aportados por la ciencia y, como podrás ver, son de mucha ayuda.

Crema hidratante y áloe vera

La hidratación es lo más importante para que puedas evitar tener problemas y que comience el pelado de tu piel. Cuando eso ocurre ya sabes que es difícil ponerle remedio y, además, resulta antiestético. Por ello, tienes que hidratarte todo lo posible. Una de las mejores formas de hacerlo es con buenas cremas hidratantes y confiando, sobre todo, en el áloe vera. Además de enfriar tu piel, lo que proporciona esta sustancia es una gran capacidad para frenar el pelado de la piel, así que su uso será perfecto.

Para aplicarlo con mejores resultados, lo más conveniente es que pongas el áloe vera sobre la zona que creas que está más delicada. Como se puede leer en un estudio, esta sustancia te ayudará de muchas otras formas, puesto que sus polifenoles protegen contra las bacterias y ralentizan el pelado de la piel. Además, ten en cuenta el momento ideal para aplicarse el áloe vera: justo después de disfrutar de una ducha fría.

Ponte protector solar

Siempre. El protector solar debe ser tu prioridad antes de salir de casa y luego a lo largo del día, porque ya sabes que no tiene una duración demasiado extensa. Esto lo tienes que hacer incluso en aquellos días en los que no hace sol o cuando no vas a la playa. Piensa que, en estos casos, no solo te estás poniendo el protector solar para protegerte del sol, sino que también lo haces con la intención de ralentizar el proceso de pelado de la piel.

En paralelo a esto, no olvides que es muy recomendable que no te pases de tiempo durante el que tomas el sol o a lo largo del cual te expones al mismo. Todo en exceso es malo, así que administra bien tu tiempo de bronceado y así luego la piel seguirá mucho más tiempo con un buen color.

Hidrátate bien

Ya sabes que tienes que poner crema hidratante para poder detener los efectos del pelado de la piel cuando ya estés bronceado. Eso es lo que garantizará que estés protegido en el exterior, pero la hidratación también afecta al interior. La forma en la que la reforzarás, en ese caso, será haciendo algo tan simple como beber agua.

Según un estudio publicado en Estados Unidos del que se hace eco la Clínica Mayo, la cantidad de agua que hay que tomar para beneficiar a la protección de la piel y con la intención de tener la mejor salud posible, está seguramente, por encima de lo que piensas. Así, lo que recomiendan es que bebas diariamente 3,7 litros de agua si eres hombre, mientras que la cantidad para las mujeres es inferior, de 2,7 litros. No hace falta que te obsesiones con esa cifra de litros si crees que te queda muy lejos. Recuerda que suele estar más extendido que la cantidad debe ser de dos litros, así que, para comenzar, ponte esa meta.

Evita estos errores

Hay dos hábitos que deberías dejar de lado si no quieres tener problemas con la pérdida del bronceado y el pelado de tu piel. Lo primero es darte baños con agua caliente. Antes ya te comentábamos que es recomendable el agua fría, por lo que evita usar la caliente porque eso hará que pierdas hidratación.

Por otro lado, prescinde de la ropa negra, puesto que no va a ayudarte a mantener el bronceado. Entre los distintos colores por los que puedes optar, el blanco es el mejor de todos. También te servirán otros colores claros, pero si tienes la oportunidad, una camiseta, vestido o pantalones blancos serán lo más conveniente.

Y no olvides este consejo

Quizá ahora ya sea tarde, aunque tenlo en cuenta para el próximo verano. Antes de comenzar la temporada de sol una de las cosas que más pueden marcar la diferencia después puede ser que te sometas a un proceso de pre-exfoliación. Pero tiene que ser antes de comenzar a tomar el sol y, además, no puede ser a una profundidad demasiado elevada. Por eso deberías llevar a cabo este proceso en un centro especializado donde sepan exactamente qué tienen que hacer para que no tengas problemas después.

Si aplicas todos estos consejos, te vas a poder beneficiar de una mejor duración en tu bronceado y así no sufrir el pelado en la piel que resulta tan odioso después de haber estado tomando el sol tanto tiempo en las vacaciones.

 

Fuente: adslzone