Los astrónomos se regocijan cada vez que se aporta nueva información sobre los planetas extrasolares. Son una fuente de sorpresas y atractivo incomparable a ninguna otra cosa que la ciencia del espacio haya dado en los últimos años porque nos podemos llegar a encontrar con cosas como la investigación de Mantas Zilinskas. Como te vamos a contar, sus modelos de simulación del planeta de lava están dando la vuelta al mundo y asombrando incluso a los más expertos.

Una Tierra con océanos de lava

Imaginar que algo así puede ser real y no parte de una película o un videojuego, impresiona. Piensa en un mundo en el cual la superficie no tiene océanos de agua, sino que está formada por fuego, por una lava que provoca que ese planeta esté a una temperatura totalmente imposible. Como te decíamos, este es un modelo de exoplaneta habitual que se ha encontrado en repetidas ocasiones entre los más de 5.000 planetas que se han descubierto en las últimas décadas.

El trabajo de Mantas Zilinskas se ha concentrado en algo muy útil: ser capaz de simular las atmósferas de estos planetas de lava para que, después, sea más fácil identificar todos esos mundos con el uso del telescopio espacial James Webb. Para el autor del estudio, el cual ya ha recibido la aprobación de las grandes mentes de la astronomía, era crucial encontrar la manera de poder explorar más de cerca estos planetas tan extraños y de los que todavía sabemos tan poco.

Pensar más allá de lo conocido

La comunidad de astrónomos se ha sorprendido mucho con el trabajo que ha realizado Zilinskas porque ha planteado una serie de ideas que resultan arriesgadas, pero que dentro de las prácticas aceptadas consiguen su objetivo. Ha empezado tomando en cuenta aquello que, hoy por hoy, se conoce sobre estos mundos de lava. Los científicos han podido calcular algunos rasgos cruzando los datos con la masa del planeta, con la distancia a la que está de su estrella principal o su radio. También sabe que utilizando los espectroscopios se puede profundizar en las atmósferas, pero no de la manera en la que él lo ha hecho. Las limitaciones y los problemas que genera el uso de un espectroscopio eran algo que quería dejar atrás con su proyecto.

Al final, lo que ha decidido es crear un modelo matemático que lo que hace es crear simulaciones en las que pronostica aquello que van a poder analizar los astrónomos. De esa manera, lo que hace su sistema es poner al astrónomo en el rumbo que necesita tomar para encontrarse con el exoplaneta y también le indica qué es aquello que se va a encontrar en él. Esa resulta una ayuda de un valor incalculable, puesto que se pueden ahorrar grandes periodos de tiempo de cálculos e investigación o de búsquedas que no llevan a nada.

Explorando un planeta de lava

Lo que cuenta Mantas Zilinskas es que estos exoplanetas de lava que ya se han descubierto antes, muestran, gracias a su simulación, una serie de condiciones acerca de cómo son en su interior. Más exactamente, describe la atmósfera de estos planetas, anticipándose, con sus cálculos, al descubrimiento de la misma. Indica a los astrónomos que la atmósfera de este tipo de mundos está formada por los silicatos que se evaporan en los océanos de lava que forman la superficie. Con la evaporación, los silicatos crean una atmósfera muy fina y tenue de la cual todavía no se conoce la composición química. No obstante, el especialista menciona que el próximo objetivo es llegar a conseguir conocer esa composición para tener un mayor conocimiento de este tipo de planetas.

Saben también que estos planetas son de un tamaño superior al de la Tierra, y que el motivo por el cual la lava fluye sin descanso se encuentra en la cercanía que tiene el mundo con su estrella madre. A partir de ahí, queda conocer otros detalles de estos planetas de lava. Pero, gracias a su trabajo, los astrónomos están más cerca de analizarlos en su totalidad.

 

Fuente: adslzone