Una colaboración totalmente inesperada entre la Facultad de Medicina Veterinaria y la Facultad de Psicología de la Universidad de Mississippi ha llevado a un estudio de lo más interesante. En el mismo se explora lo que ocurre cuando se dan dos circunstancias: personas que tienen problemas de acaparamiento y aquellas que, al mismo tiempo, cuentan con una gran cantidad de mascotas. ¿Cuáles han sido los resultados?

No lo estás haciendo bien

Si tienes muchos animales en casa, ya sea por un motivo u otro, es posible que estés exponiéndote a problemas. En el estudio especifican que los casos complicados son aquellos en los que se dan las dos circunstancias: que tengas muchas mascotas y que también sufras el síndrome del acaparamiento. Eso significa que, no solo acumulas animales, sino que prácticamente recoges y guardas cualquier tipo de cosa que se te ocurra, o que lo hagas dentro de un rango determinado de objetos. El trastorno del acaparamiento suele estar relacionado con viviendas muy desordenadas en las que se da más importancia a continuar acumulando que a buscar la comodidad.

Ese tipo de personas, las que encajan en los dos grupos, aunque es justo decir que quienes sufren el trastorno del acaparamiento compulsivo no suelen reconocerlo ni ver el problema por sí mismos, se exponen a que su salud y bienestar se vea afectado. No solo el suyo, sino también el de las mascotas a las que cuidan. Es lo que se publica en este estudio que ha sido publicado por el Journal of the American Veterinary Medical Association.

El problema de querer ayudar

Por supuesto, no hay nada malo en rescatar mascotas y cuidar de ellas. Se ha precisado en el estudio que el límite, en cuanto a cantidad, se encuentra en 8 mascotas. A partir de esa cifra las estadísticas evidencian problemas y exposición a que se produzcan distintas situaciones de riesgo. Por lo tanto, si tienes dos o tres perros, gatos o pájaros, no te tienes que preocupar. Por las indicaciones que hacen en el estudio, se habla de personas que superan los límites de lo comprensible y que se obsesionan rescatando más y más animales en lugar de acumular otro tipo de elementos, como libros o recortes de periódicos.

Lo que les preocupa a Mary E. Dozier y Ben Porter, de Psicología, y a Jacob Shivley y Mary «Becky» Telle, de Veterinaria, es que se puedan reducir aquellos casos en los que se producen incidentes con animales que no están cuidados de una manera conveniente. Entienden que haya personas que quieran ayudar a los animales sea como sea, pero se han dado muchos casos en los que el acumulamiento acaba pasando factura de estos y también de los propietarios. En especial comentan que, al menos en Estados Unidos, hay un problema notorio con este tipo de situación en las zonas rurales.

Con los resultados de incidencias veterinarias y casos registrados en las manos, los responsables del estudio han comprobado que en esos hogares donde se sufre acaparamiento es muy habitual que los perros o gatos acaben teniendo problemas de deshidratación y que sufran enfermedades. También son hogares en los que no se fomentan hábitos saludables en las mascotas, como llevarlas al veterinario habitualmente.

La obsesión de intentar salvar a la mayor cantidad posible de mascotas nubla el juicio de esas personas a las que, eso sí, el equipo que está al frente del estudio intenta ayudar. Quieren que los resultados de su trabajo se puedan aplicar de una manera real y así facilitar la vida tanto de los propietarios como de sus mascotas.

 

Fuente: Phys | adslzone