Eficiencia de la certificación 80 PLUS en fuentes de alimentación

En el proceso de transformación, parte de la energía se pierde en forma de calor. Una fuente de alimentación más eficiente necesita menos corriente alterna para producir la misma corriente continua que una fuente de alimentación más ineficiente, produciendo menos calor en el proceso. Este es el motivo de que algunas de las fuentes más eficientes puedan funcionar en modo pasivo si necesidad de que el ventilador entre en funcionamiento.

Por ello, vamos a determinar cuánto ahorraríamos en nuestra factura de la luz con nuestra fuente de alimentación, y si merece la pena pagar más por una más eficiente. La certificación ATX requiere que una fuente, como mínimo, tenga un 60% de eficiencia al 50% de carga. Esto es relativamente fácil de conseguir, y la mayoría de fuentes consigue un 70% de eficiencia al 50% de carga con respecto a la capacidad real anunciada (una fuente de 600 W con un 70% de eficiencia estaría dando 420 W reales)

Para mejorar su eficiencia, en 2005 se creó el programa 80 PLUS, que mide la eficiencia de las fuentes al 20, 50 y 100% de carga, siendo necesario obtener más de un 80% para obtener la certificación. Conforme se mejoraron las placas base, fue necesario ampliar el programa con certificaciones Bronze, Silver, Gold, Platinum y Titanium, alcanzando esta última una eficiencia de hasta el 96% al 50% de carga.

En la siguiente tabla podemos ver la diferencia de vatios perdidos para un ordenador que solicita unos 250 W, lo cual suele ser una carga normal jugando si tenemos una tarjeta gráfica como una GTX 1070 y un procesador como el i5-7600. Recordamos que una fuente de alimentación sólo ofrece tanta energía como se demanda, es decir, que una fuente de 600 W no está consumiendo 600 vatios constantemente, sino que podría llegar a consumir esa cantidad.

¿Cuánto dinero se ahorra con una fuente 80 PLUS mejor?

Vamos a suponer un uso medio diario de 16 horas en el que el ordenador está encendido de la siguiente manera:

  • Encendido en reposo: 50 W durante 2 horas.
  • En modo suspensión: 5 W durante 4 horas.
  • Uso normal: 100 W durante 8 horas.
  • Uso jugando: 300 W durante 2 horas.

El consumo total durante las 16 horas habrá sido de 1.500 vatios, o lo que es lo mismo, una media de 95 vatios por hora. Suponiendo que el fin de semana usemos el ordenador la mitad, el consumo medio serían 47,5 vatios por hora. Eso hace un total de 96 horas por semana. Si contamos que hay 52,1775 semanas en un año, salen 5009,04 horas al año. Multiplicando 95 vatios por esas horas tenemos 475.858,8. Si lo dividimos por 1000, tenemos los kWh totales que consume el PC al año, que son 475,8588 kWh.

Si suponemos el precio medio del kWh con tarifa fija que ofrece Gana Energía con su tarifa Gana Zone de 0,112 € por kWh. Si cogemos la eficiencia media de cada calidad de fuente de alimentación al 50% de carga, nos queda de la siguiente manera:

Como vemos, la diferencia entre usar una fuente 80 PLUS (que puede valer 50 euros) y usar una fuente 80 PLUS Gold (que puede valer 100 euros) supone un ahorro anual de unos 5,5 euros, que a lo largo de 6 años de vida útil de un ordenador pueden suponer unos 33 euros que podríamos haber echado en pasar de una fuente de alimentación 80 PLUS a una fuente 80 PLUS Gold, con ventajas como menor ruido al tener ventilación pasiva algunos modelos, o desprender menos calor a los componentes de nuestro ordenador, así como más mecanismos de protección en caso de cortes de electricidad o subidas de tensión.

Por ejemplo, tenemos una EVGA SuperNOVA G2 80 Plus Gold de 550 W por 99,95 euros en Amazon, frente a una fuente 80 PLUS equivalente como la Corsair VS550 y vale 49,95 euros. La diferencia de precio de 50 euros queda reducida a apenas 17 euros en el plazo de 6 años, por lo que quizá te convenga pasar a una fuente más cara, pero más eficiente y de mayor calidad.

Fuente más cara suele ser igual a fuente de alimentación de mejor calidad

En alguna ocasión hemos recomendado también tener en cuenta el largo plazo a la hora de hacer un ordenador por piezas, ya que, aunque el coste inicial pueda ser superior que el de una consola, un ordenador seguro que lo vamos a usar durante muchas más horas que las que lo usamos para jugar gracias a que un ordenador sirve para mucho más que eso.

Además, hemos utilizado un ordenador medio, pero si nos vamos a ordenadores más potentes, incluso con varias tarjetas gráficas, el ahorro es muchísimo mayor y claramente compensa pasar a una fuente de mayor calidad. Si dejas el PC encendido por la noche, el coste extra de una fuente Gold se compensa mucho antes, además de poder reutilizarla en un futuro ordenador.

En el caso de que vayáis a compraros una fuente de alimentación, os recomendamos también que os paséis por nuestra guía de compra de fuentes de alimentación, en la que recogemos la diferencia de calidad que hay entre elegir una u otra fuente, ya que cuanto más eficiente sea ésta, más calidad suelen tener sus componentes. Las fuentes más baratas suelen ser menos eficientes, y su mala calidad puede poner en riesgo nuestro ordenador.

 

Fuente: adslzone