Las compañías de telefonía suelen obligar a sus clientes a firmar un compromiso de permanencia a cambio de ofrecer una serie de condiciones más ventajosas en sus servicios. Puede ser por realizar algún descuento en alguna de sus tarifas o por alguna promoción en alguno de los terminales que tengan en ese momento en el catálogo.
Por este motivo, lo primero que tenemos que hacer cuando vemos una oferta interesante en el mercado es comprobar si hemos firmado algún compromiso que nos obligue a estar un tiempo mínimo con nuestra compañía. Si es así, deberemos pagar una determinada cantidad de dinero para poder hacer el cambio. Sin embargo, siempre hay excepciones. En el caso de Movistar y de O2, al ser marcas del grupo Telefónica, podemos hacer la portabilidad de Movistar hacia O2 sin tener que asumir ningún tipo de penalización, incluso si tenemos una permanencia activa.
Portabilidad a O2 sin penalización
De acuerdo a la información que tiene O2 publicada en su página web, “si tienes permanencia en Movistar, al venir a O2, no te penaliza ya que somos marcas del grupo Telefónica”. Esta situación no aplica si queremos cambiarnos a cualquier otra operadora “fuera del grupo”. En este caso, sí que tendríamos que abonar la penalización correspondiente, aplicada por la propia Movistar.
Por lo tanto, si actualmente somos clientes de Movistar, pero O2 tiene alguna tarifa que se pueda adaptar mejor a nuestras necesidades particulares, vamos a poder hacer el cambio siempre que queramos sin tener que abonar la permanencia que hayamos firmado previamente con el operador azul.
Para confirmar que la información que aparece en la web es correcta, también nos hemos puesto en contacto con la operadora a través de su canal de atención al público. Y, efectivamente, han confirmado que dicha opción se puede hacer sin ningún coste, con independencia del compromiso de permanencia que hayamos firmado.
Sin nueva SIM
Además de lo anterior, el proceso de portabilidad entre Movistar y O2 también es diferente al que tendríamos en cualquier otra compañía, puesto que va a funcionar la misma SIM que ya tenemos en nuestro terminal. El proceso se realiza mediante portabilidad electrónica y la SIM de Movistar es compatible con los servicios de O2, sin que tengamos que tener una nueva tarjeta. No obstante, si nuestra tarjeta está deteriorada o hemos tenido algún problema con ella, siempre vamos a poder solicitar un reemplazo a través del 1551 para recibirla en nuestro domicilio.
La razón de que no necesitemos una nueva tarjeta es que ambas compañías comparten la misma red y la infraestructura. El tiempo de espera, por tanto, también se reduce al máximo y todos los pasos son mucho más ágiles de lo que nos encontraríamos en una portabilidad tradicional.
Fuente: adslzone
