El primer anuncio de Orange es que, pese a que han aumentado un 35% sus clientes de fútbol en el último año (septiembre de 2021 vs septiembre de 2020), el operador ha anunciado que no va a participar en la subasta de LaLiga. El motivo parece lógico: si participa, aumentará los precios finales, lo que le puede perjudicar tanto al propio operador como a los consumidores finales para ver el fútbol.

Orange volverá a negociar con el ganador de la subasta

Jean-François Fallacher ha afirmado que estudiarán si ofrecerán o no el fútbol dependiendo del resultado de la subasta, ya que con los nuevos paquetes no está claro quién va a hacerse con los derechos de emisión de cada contenido ni el precio final. Lo más probable es que Telefónica se haga con lo más importante, pero también puede que DAZN o Amazon Prime Video les quiten algún paquete.

Así, vemos que van a seguir una estrategia a la de procesos anteriores, donde tras la subasta, Orange negocia con Telefónica el precio para emitir el fútbol. Se estima que Orange tiene en la actualidad unos 500.000 clientes con el fútbol contratado.

Más allá del fútbol, el operador ha anunciado que va a cerrar todas las tiendas propias que no sean rentables, en un nuevo camino de racionalización del canal físico tras la caída de visitantes en favor de los canales online. La pandemia ha cambiado los hábitos de consumo de los usuarios, y cada vez hay menos que visiten las tiendas.

Cerrarán 40 tiendas antes de que acabe 2021

El cierre de las tiendas se realizará al margen del ERE que aplicó el operador, ya que éstas quedaron fue de él. En total, Orange tiene unas 800 tiendas en España, y se estima que de cara a finales de 2021 van a cerrar unas 40 tiendas.

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No obstante, la compañía afirma que van a realizar los cierres con cautela, ya que el canal físico sigue siendo muy importante. Así, no plantean un cierre total de las tiendas como el que está estudiando Vodafone en el mismo proceso del ERE. Las tiendas que tienen más probabilidad de cerrarse son las más pequeñas, ya que en ellas el operador no puede ofrecer la experiencia de marca que quiere para todo su canal de distribución, similar a lo que están haciendo otros operadores como Movistar que han rediseñado por completo sus tiendas.

Los clientes en Orange no paran de crecer, donde llevan cinco trimestres consecutivos con altas netas positivas, alcanzando ya los 20,2 millones de clientes en España. De ellos, 16,2 millones corresponden a móvil, y 4 millones a banda ancha fija.

En el caso de Vodafone, el operador ha anunciado que van a cerrar 34 tiendas de las 600 que tienen en España, echando la persiana en todas las tiendas propias, quedándose las de franquicias y distribuidores. A su vez, también se ha conocido el resultado del ERE, donde al final dejarán la empresa 442 personas, un 15% menos de las 519 planteadas al principio.

 

Fuente: adslzone