Te hablamos de Ansel Troy, un ciudadano norteamericano que ha logrado el sueño de abandonar su trabajo y poder dedicarse a algo totalmente distinto. Lo ha hecho a través de Airbnb a raíz de la idea que tuvo de aprovechar su vivienda para rentabilizarla y obtener dinero. Lo primero que hizo fue usar su garaje y convertirlo en un bonito estudio. La jugada le salió bien. Luego decidió dar el siguiente paso. Es en ese punto donde aparece el negocio y la oportunidad que seguro que te gustará conocer.
Instalar una casita en el jardín
Esa fue la idea que tuvo Troy. Sacrificar el garaje ya le daba algunos ingresos, así que no se deprimiría si sacrificaba una parte del césped de su zona exterior para poner una casita. Solo tenía que encontrarla. Cuando vio una buena oferta online por un precio de unos 33.000 dólares, decidió lanzarse a la piscina. Por desgracia, no tenía ese dinero en sus manos en ese momento, unos 30.000 euros al cambio. Para pagarlo solicitó un crédito poniendo la hipoteca de su vivienda como garantía. Se trataba de un riesgo, pero al final le salió bien.
Troy se desplazó hasta el lugar donde estaba la casita. Sus propietarios la habían usado durante un breve periodo de tiempo y él estaba entusiasmado con la idea de llevársela, aunque no sabía cómo. Tuvo que alquilar un camión y solicitar la ayuda de los vendedores para que le ayudaran a conectarla al camión. A partir de ahí solo le quedaba conducir de camino a casa en Oakland, California.
Cuando llegó la instaló en uno de los lados de su vivienda, en un espacio que tiene las dimensiones adecuadas para su colocación, y comenzó a pensar en cómo presentarla en Airbnb. Este es uno de los primeros retos con los que te vas a encontrar: decidir cómo rentabilizar tu casita.
Estancias breves para ganar dinero
El inquilino que vivía en el estudio de su garaje estaba a largo plazo y, aunque es un ingreso bienvenido, Troy sabía que eso iba a suponer un problema para las finanzas. Por ello, optó por la fórmula de las estancias breves. Eso le permitiría ganar más dinero y, al mismo tiempo, tener un mayor flujo de clientes. La idea es fundamental, dado que de esa manera generas un mejor boca a boca y, si tu casita gusta, podría acabar siendo viral.
A Troy todo le salió a pedir de boca. Las reservas empezaron a llegar y aunque al principio el préstamo que había solicitado le ahogaba, en ese tiempo todavía tenía un trabajo y podía pagarlo sin tener que dejar de confiar en su negocio de Airbnb. Al final las mensualidades de su crédito, de un valor de 300 dólares mensuales, terminaron por no suponer ningún tipo de problema: la casita las estaba pagando.
Casa pequeña, idea grande
Tiempo después, Troy pensó que todavía tenía jardín de sobras, por lo que podría poner otra casita. Recurrió a un segundo modelo distinto, pero que encaja bien dentro del estilo del jardín y de su concepto. Pagó 35.000 dólares sabiendo que no tendría problemas para devolver el préstamo, puesto que el flujo de dinero ya era prácticamente constante.
Valoró distintas ideas como tú también puedes hacer, pero al final se le ocurrió convertir esa segunda casita en un lugar puramente viral. Toda la decoración y toda la disposición interior están pensadas para que sea un sitio donde quieras hacerte fotos de Instagram sin descanso. Esto ha provocado que sean muchos profesionales de la fotografía, modelos, tatuadores y otras personas interesadas, quienes hayan hecho reservas y que mantengan el flujo del negocio de la segunda casita en marcha.
En temporada alta, por la segunda casita puede llegar a cobrar 250 dólares la noche. Con la suma de ingresos que tiene de las dos casas obtiene unas cifras que le proporcionan una estabilidad económica realmente alta y que, además, le permiten tener una vida más tranquila.
Triunfar en Airbnb
Seguro que sabes qué es Airbnb y que eres consciente de la manera en la que ha revolucionado la búsqueda de alojamiento. Teniendo esto en cuenta, piensa en un Airbnb en Madrid o en cualquier otro lugar que se te ocurra. Quizá tengas una casa con su espacio de jardín y que no lo estés aprovechando para nada. ¿No podría ser una oportunidad interesante? Todo depende del enfoque y de cómo hagas el planteamiento. Lo que está claro es que, en estos tiempos, las ideas frescas son las que tienen más posibilidades de convertirse en virales. Y si eso ocurre, seguro que el negocio acaba saliendo bien y te proporciona unos buenos ingresos pasivos.
Si quieres unos consejos adicionales, Troy menciona que él nunca ha pagado a los influencers de viajes que le han ofrecido campañas virales a cambio de un pago de 4.000 dólares. En lugar de ello, los influencers y tiktokers en los que ha generado interés han acabado echándole una mano sin ningún tipo de compromiso. Así, poco a poco, sus casitas han acabado siendo famosas.
Fuente: BusinessInsider | adslzone
