Navegar por Internet se ha convertido en una sucesión interminable de clics para aceptar o rechazar cookies. Cada visita a una página nos obliga a configurar qué datos queremos que la web recuerde o incluso comparta y qué no. La UE está dispuesta a acabar con esta experiencia frustrante, según afirma un artículo de POLITICO publicado hoy, 22 de septiembre de 2025, a las 4:22 AM.
Cambio de reglas de las cookies en Europa
El medio de comunicación ha tenido acceso a una nota que la Comisión Europea envió a la industria y a la sociedad civil que asistieron a un grupo de discusión realizado el pasado 15 de septiembre, con el fin de ajustar las reglas de cookies. En la publicación, explican que Bruselas estaría barajando la posibilidad de que los usuarios solo tuviesen que configurar sus preferencias sobre las cookies una vez. Por ejemplo, desde los ajustes de su navegador web, para evitar hacerlo cada vez que visitan un sitio web.
Esto es algo que surge después de que Dinamarca, que actualmente preside las reuniones del Consejo de la UE, plantease la eliminación de los avisos de consentimiento para las cookies que recopilan datos en datos «para funciones técnicamente necesarias» o «simples estadísticas». Este tipo de cookies son «inofensivas», no como las que se usan para marketing, publicidad o compartir datos con terceros.
La parte de la industria que formó parte del grupo de discusión sugirió que las normas sobre las cookies deberían incorporarse al Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la UE. Cabe señalar que, actualmente, están dentro de la Directiva sobre Privacidad Electrónica que establece requisitos estrictos de consentimiento, una norma tecnológica que data del 2009.
La propuesta de la UE haría todo más fácil
Todos los sitios webs deben informar y obtener el consentimiento explícito de los usuarios antes de instalar cookies que recopilan datos, como los inicios de sesión o los artículos que buscan para ofrecer publicidad personalizada o adaptar sus algoritmos. Hay personas que las rechazan, pero muchas otras terminan dando permiso para evitar pasar por el proceso de rechazarlas de una en una.
Al tener que realizar la configuración solo una vez, el proceso se volvería menos tedioso y los usuarios tendrían mayor gestión de su privacidad. Sin embargo, de llevarse a cabo esta simplificación de las cookies, Bruselas se enfrentaría a los lobbies que defienden el sistema actual.
Antecedentes a esta posible simplificación de las cookies
Hay una razón por la cual se cree que Europa tendrá que enfrentarse a grupos de presión para aplicar la reforma a la ley de las cookies: en el pasado se intentó y no se pudo. Un ejemplo de ello fue la propuesta de Reglamento de Privacidad Electrónica presentada en 2017, puesto que hay quien busca un equilibrio entre la protección de la privacidad digital y la competitividad de la industria tecnológica en Europa.
Según afirman en el medio de comunicación POLITICO, «cualquier nueva iniciativa para alterar el consentimiento de las cookies se enfrentará a una fuerte oposición del feroz lobby de privacidad de Bruselas, que se muestra cauteloso ante el uso de cookies para publicidad dirigida».
Todavía no es oficial que la UE vaya a trabajar en una reformulación de las cookies actuales. Sin embargo, con los datos arrojados en el artículo de POLITICO, cabe esperar que salga a relucir con la presentación de la Ley de Equidad Digital, una normativa que la Comisión Europea quiere poner sobre la mesa el año que viene y que estará centrada en la publicidad en línea.
