Este tipo de pantallas ya son una realidad, por ejemplo, ya se pudieron ver durante el anterior CES. Este tipo de tecnología usa Quantum dots para los tres colores primarios (azul, rojo y verde), por lo que está ante pantallas con RGB puros.

Qué son las pantallas QDEL

Las pantallas con la tecnología QDEL, como veíamos anteriormente, consiste en que usan Quantum Dots en azul, verde y rojo con la finalidad de generar el color. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que estamos ante una tecnología alternativa autoemisiva, cada píxel se enciende por sí solo cuando es necesario. Sin embargo, aunque ya no es tanto teórico, no se comenzará a producir de verdad hasta 2026. Año en el que se tiene, al menos, esa esperanza, ya que el objetivo de esta tecnología es bastante ambicioso.

Se considera que es ambicioso por el hecho del número limitado de prototipos que se han podido ver con esta tecnología, además de las diferentes limitaciones a las que todavía tiene que hacer frente la tecnología QDEL. Sin embargo, todo apunta a que podría ser una verdadera amenaza para las pantallas OLED. Por ejemplo, podría tener una relación coste-rendimiento mejor que los paneles OLED, aunque en términos de coste todavía estaría por debajo de las pantallas LCD-LED.

En cuanto a su funcionamiento, esta tecnología en particular funciona a través de puntos cuánticos que se usan, en la actualidad, con la finalidad de convertir una longitud de onda de luz en otra, y casi sin pérdida de luminancia. De ahí que se puedan encontrar Smart TV con diferentes tipos de paneles: QLED, QD-OLED o QNED. Al igual que dichos puntos cuánticos, también se pueden dar directamente a través de electricidad y no solo limitarse a actuar como intermediarios. Dicho de otra manera, nos referimos a la electroluminiscencia, que es la base principal de esta tecnología QDEL o NanoLED.

No hay riesgo de quemado

Al contrario de los que ocurre con la tecnología QLED, por ejemplo, no se usan puntos en rojo y verde para convertir la luz azul, sino que se usan los tres colores que funcionan con electricidad. De ahí el hecho de que cada píxel es autoemisivo, consiguiendo un negro más puro y perfecto como ocurre con las Smart TV OLED.

Aunque, hay un aspecto que juega a favor de esta reciente tecnología. Se da la degradación con el paso del tiempo, pero no está el riesgo de posibles quemados en las pantallas. Y todo porque son más resistentes ante este tipo de problemas que se dan en las pantallas OLED. Además de que consiguen más brillo por vatio, logrando hasta picos de hasta más de 600.000 nits (alcanzan 614.000 nits). Por toda esta serie de características, los expertos consideran a esta tecnología como la mejor opción para el futuro de las pantallas.

 

Fuente: Arstechnica | adslzone