Según recoge la agencia EFE, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha confirmado la pena a un hombre de 46 años que durante varios años vendió 130 dispositivos electrónicos modificados para ver fútbol de forma ilegal y gratuito pese a no tener los derechos.

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Más de 100 dispositivos

Tal y como recoge la mencionada agencia, Carlos B.M. de 46 años vendió un total de 130 dispositivos entre noviembre de 2016 y marzo de 2019 para piratear partidos de fútbol emitidos en canales de pago y poder verlos de forma gratuita e ilegal. Ahora se enfrenta a una pena de un año de prisión, más de 13.000 euros de indemnización y 2.190 euros de multa.

Los dispositivos eran dispositivos “smart tv box” del tipo decodificadores que te permiten instalar Internet y acceder desde el televisor. Pero estaban modificados con el fin de poder ver competiciones cuyos derechos eran en exclusiva de la productora Mediapro.

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El precio de los dispositivos, según EFE, oscilaba entre los 75 euros por cada uno de ellos o los 140 euros dependiendo de las características de los mismos. Y el condenado logró ganar una cantidad de 13.379,93 euros. Misma cantidad que ahora tendrá que pagar como gastos de indemnización según ha ratificado el tribunal madrileño. Además, se añade a la pena un año de prisión y la multa por delito relativo al mercado y a los consumidores y el tribunal ha desestimado el recurso presentado por el acusado.

Configuración y distribución

Los decodificadores o Smart TV Box vendidos no requerían ningún tipo de programación ni configuración especializada, sino que bastaba con enchufarlos y conectarlos a Internet sin ningún tipo de pago mensual ni cuota o suscripción a ningún servicio, accediendo de forma ilegal a estas competiciones durante más de dos años.

Según la información que recoge la sentencia el acusado “explicitaba, comercializaba, promocionaba, vendía y distribuía” a través de una página web especializada del que era él el titular y donde estaban a la venta dichos aparatos. Además, no solo colgaba en esta web los diferentes dispositivos, sino que también los anunciaba en redes sociales como Facebook donde publicitaba los dispositivos incluyendo la información y avisando a los posibles compradores que estaban preparados para acceder a los contenidos de forma sencilla.

No solo vendía los aparatos para acceder de forma ilegal a competiciones de pago, sino que también participaba en la asistencia técnica y la ofrecía, según han recogido algunos de los correos intercambiados con compradores y como servicio de postventa.

Un caso más que demuestra que la piratería por IPTV sigue vigente y son continuos los cierres.

 

Fuente: adslzone