El revisor de la zona azul es uno de los más temidos. Incluso más que un policía local. Siempre que estacionamos en este tipo de calles con líneas azules o verdes, es necesario pagar un precio por hora. Será el propio ayuntamiento quien decida los tramos de precio y los horarios, aunque existen algunos consejos que debes aprender para no pagar de más.
Puedes aparcar sin pagar
Aparcar en una zona azul o verde puede ponerte en un apuro si no conoces este truco. Las empresas de este tipo permiten que estacionemos el coche durante un máximo de 10 minutos, siempre que el conductor esté en el interior. El revisor no podrá decirte nada si te ve dentro del coche sin pagar el ticket, aunque puede esperarse el tiempo delimitado para llamar tu atención. No obstante, si llegas en los minutos últimos del pago, puedes esperar dentro hasta la hora final para no tener que pagar.
Además, hay otras excepciones por las que se puede aparcar en zona azul sin pagar. Por ejemplo, si has parado para cargar y descargar, pero el conductor está presente, no hará falta que pagues hasta que termines. Asimismo, si tu coche está identificado con la tarjeta de aparcamiento de personas con movilidad reducida, tampoco deberás pagar zona azul.
Algunas multas prescriben
¿Aparcaste sin pagar y te advirtieron de que te llegaría una multa a casa? Si en el plazo de tres meses no te lo han notificado, las empresas más famosas en estacionamiento regulado aseguran que prescribe. Sin embargo, no ocurre lo mismo si te multan y decides no pagar los costes de la sanción.
Una vez multado tienes 20 días para pagar sin que se generen recargos. Y no, no puedes esperar tres meses sin pagar para que la multa se extinga mágicamente. Puede seguir generando intereses hasta cuatro años, por lo que cuando te decidas a pagar, el coste será mucho mayor. Normalmente, dejar el coche aparcado sin pagar tiene un coste de 4 o 5 euros. Por lo que no es una multa muy elevada, pero tampoco es más barato que pagar el estacionamiento, como muchos piensan.
Pagar con app es más barato
Se acabó eso de tener que llevar dinero efectivo para echar monedas en el parquímetro. Desde que las empresas de estacionamiento regulado se modernizaron, sus apps son mucho más efectivas que tener que sacar el ticket en la máquina. Además, sacar el ticket manualmente conlleva pagar una cantidad limite, sin opción a que nos devuelvan el resto. Es decir, si has calculado que tardarás 2 horas en comprar, tendrás que pagar un primer ticket y volver para alargar su valor.
En cambio, hacerlo por la aplicación es mucho más sencillo y económico. Podrás elegir el tiempo que más te convenga e ir renovando directamente desde el móvil cuando el estacionamiento llegue a su fin. Además, si pagas de más y cancelas antes de que se consuma el tiempo indicado previamente, algunas empresas (como Appakya) te devolverán la diferencia.
Los coches eléctricos no pagan
A pesar de que pagar con la aplicación oportuna puede ser más barato a largo plazo, es posible que no tengas en cuenta ciertas bonificaciones. Dependiendo de la ciudad, algunos tipos de coche (los más respetuosos con el medio ambiente) no tienen que pagar el estacionamiento regulado.
Sin embargo, para no tener que aprenderte las diferentes normas de los ayuntamientos, será el parquímetro quien te asesore durante el pago para confirmar si tienes un descuento o si puedes no pagar directamente. Normalmente ocurre con los coches de etiqueta ZERO o totalmente eléctricos, pero también hay excepciones para híbridos enchufables o etiqueta ECO. Aun así, es mejor que acudas a la máquina para asegurarte de cuánto tienes que pagar, antes de iniciar el proceso por la app.
Fuente: adslzone
