Aparcar mal puede tener como consecuencia directa que la grúa se lleve el coche. Aunque, en otras situaciones solamente puede quedarse en una multa de tráfico por haber estacionado mal el vehículo. No obstante, cuando ves que el coche no está siempre surge la duda de… ¿me lo han robado? Para encontrar la respuesta, vamos a conocer cómo tienes que actuar.
Se ha llevado el coche la grúa
En el momento de estacionar mal el vehículo, corres el riesgo de que la grúa se lo acabe llevando al depósito municipal. No siempre te tienes que poner en lo peor y pensar que te lo han robado, ya que lo más probable es que no haya pasado justamente eso. Por esto mismo, si un día aparcas mal y a la vuelta no encuentras el coche, así es cómo puedes saber rápidamente si se lo han llevado o no:
- Habrá una etiqueta triangular o cuadrada de un color llamativo (amarillo, naranja, verde…) en un lugar visible. Por lo general, la ponen en la acera o cerca de dónde habías dejado el vehículo. En ella, podrás ver la matrícula del coche, quién se lo ha llevado, a qué depósito municipal y el número de contacto para solicitar más información.
- Si no han dejado ninguna etiqueta, ponte en contacto con el depósito municipal. En las grandes ciudades, puedes consultarlo a través de las páginas de sus ayuntamientos la localización de tu vehículo si se lo ha llevado la grúa.
¿Cómo lo recuperas?
Lo más seguro es que el vehículo no te lo hayan robado, sino que al estacionarlo incorrectamente se lo haya llevado la grúa. Una vez que confirmes dónde está el vehículo, debes conocer cómo sacar el coche del depósito municipal:
- DNI, NIE o pasaporte.
- Permiso de circulación o la documentación del vehículo que tengas. Al estar dentro del vehículo, te dejarán acceder al coche para cogerla y presentarla sin problemas.
- Datos del titular del vehículo.
- Pago de la retirada del vehículo. En función del municipio, el coste será mayor o menor. Además, ten en cuenta que si la grúa se ha llevado tu coche por estar mal estacionado, tendrás que hacer frente a la multa del tráfico y a los costes del desplazamiento hasta el depósito.
Por último, uno de los detalles en el que no todos los propietarios se fijan es en si el vehículo ha sufrido cualquier tipo de daño. Si cuando dejaste el coche aparcado no tenía un golpe, rozadura o similar, pero al recuperar el vehículo te diste cuenta de cualquier daño, entonces te tocará presentar una queja y luego una reclamación. Te recomendamos que hagas fotos del coche antes de moverlo para reclamárselo al ayuntamiento en concreto al que pertenezca la grúa.
Fuente: adslzone
