Seat y Cupra también son eléctricos

El Grupo Volkswagen sorprendió al mundo hace unos años con la toma de una decisión que nadie se esperaba: Cupra pasaría a ser una marca independiente. Este anuncio se produjo en el año 2018 y, tres años más tarde, la firma autóctona ya cuenta con su propio elenco de vehículos.

Sin embargo, todos sus integrantes, a excepción del Cupra Formentor, toman como base modelos Seat. ¿Es esto algo malo o que deba ser contemplando como un ultraje? Para nada, y sobre todo si partimos de la premisa que nos guste Seat. Pero esta situación que sí obliga a plantearnos cuánto merece la pena una u otra firma.

O lo que es lo mismo; por qué elegir una u otra y qué diferencias podemos encontrar entre Cupra y Seat para los que son los coches eléctricos, los de nueva generación. Porque sí; aunque ambas marcas tienen algunos lazos sanguíneos, al menos en lo que fue el nacimiento de la segunda, encontramos modelos y tecnologías similares, pero con detalles que lo diferencian.

Cómo son ambas marcas

Pero para conocerlas hay que empezar desde el principio. En el caso de Cupra, la marca filial de Seat comenzó su andadura con el Cupra Ateca, el primer producto de la firma independiente. Se trataba de la versión más deportiva del Seat Ateca que esconde en sus entrañas un motor de 2.0 litros y 300 CV de potencia.

El mismo es el coche que ha permanecido como único modelo en sus primeros tiempos, hasta la llegada del Cupra León y el Cupra Formentor, siendo este último el primer modelo de Cupra que no se basa en un Seat. Y con estos lanzamientos la marca Cupra pretende hacerse un sitio en el mercado más enfocado a la deportividad y exclusividad. Y es que precisamente eso han pretendido con Cupra, hacerla más exclusiva, aprovechar su carácter deportivo y único. Seat es una marca de volumen, hace muchos coches, y eso resta exclusividad.

Con la independencia de Cupra se consigue dar fuerza a la marca, haciendo que sus productos sean más exclusivos, una de las razones principales de por qué Cupra se separó de Seat. Una filosofía la de la marca ‘premium’ que ha cambiado por completo en esta nueva etapa hacia los coches eléctricos. De hecho, el primero de su nueva generación es el reciente lanzamiento del Born 100% electrificado.

Por la parte de Seat, tenemos que decir que, por el momento, el único EV es el denominado es el-Born (no confundir con el ‘Born’ de Cupra), si bien ambos son eléctricos. Con todo, entre ambos coches sí que hay diferencias, sobre todo en lo que respecta a la segunda. Antes se hallaba el Mii Electric, aunque ya no se vende.

Estas son sus diferencias

Ambos son los grandes potenciales en este segmento, aunque la de Martorell siempre se ha dirigido hacia un campo más frecuente que el que podemos dar hoy con Cupra, especialmente en el terreno de los eléctricos.

Así, el mero hecho de que el escogido para presentar su entonces nueva marca fuera el Ateca ya nos debería llevar a la idea de que la pretensión de Cupra, como hemos visto ahora con el Born. Esta no es otra que ir mucho más allá de los coches deportivos asequibles y picantes, y muy juveniles, que anteriormente se construían sobre el Ibiza y el León.

Otra de sus grandes distancias lo vemos en el tipo de usuario al que se quieren prestar. Y es que, en el terreno de los coches eléctricos, tanto Cupra como Seat seguirán haciendo vehículos deportivos. Ahora bien, el objetivo de Seat, en su caso, pasa por ampliar su línea de negocio. La de Cupra ya no piensa únicamente en crear versiones deportivas para todos los bolsillos, sino sobre todo en vender coches muy bien equipados, con muchos detalles, y materiales en ocasiones exóticos y caros. Es lo que se ve en el el-Born 2022 de la española que, aunque tiene ciertas semejanzas con el de nivel ‘premium’, sus prestaciones son algo inferiores, quizás el punto que más nos hace ver cómo es una marca y otra.

 

Fuente: adslzone