En la evaluación publicada hoy por la Comisión Europea se concluye que, en general, las reglas actuales para el despliegue de fibra están funcionando bien y se adecuan a lo que requieren estos despliegues. Sin embargo, también afirman que puede que sea necesario realizar algunos ajustes para adaptar las reglas actuales a los avances tecnológicos y alinearlos con los objetivos de la EU 2025 Gigabit Society y la 2030 Digital Compass.

Primera revisión de leyes en ocho años

Este proceso de evaluación tiene como objetivo determinar cómo la normativa actual ha influido en el despliegue de redes con un coste mínimo, incluyendo las facilidades que se han dado para llevar a cabo despliegues, o las limitaciones a la posible falta de competencia en algunos países o zonas.

Las conclusiones de la evaluación son claras, afirmando que el marco legal actual facilita los despliegues y la competencia, y ha permitido llevar a cabo un importante despliegue y adopción de las redes de nueva generación con velocidades de más de 100 Mbps.

No obstante, también han determinado que son necesarios algunos cambios. Por ejemplo, hay que dejar claros algunos conceptos como mapeo, consulta pública o precios mayoristas. También recomiendan simplificar algunos conceptos y contenidos, así como hacer algunos ajustes que reflejen las prioridades actuales de la UE. También quieren que se detalle mejor el uso de las ayudas de los gobiernos a los despliegues, así como que se aumenten las velocidades mínimas para alcanzar cifras de 1 Gbps.

Sociedad Gigabit: el gran objetivo de la UE

Tras esta evaluación, la Comisión Europea analizará los resultados y los tendrá en cuenta cuando revise las leyes actuales. En las próximas semanas, la Comisión publicará una hoja de ruta para los despliegues, y publicará el primer borrador en otoño de 2021. El principal objetivo de los nuevos cambios será que las autoridades públicas tengan un mayor poder para garantizar que hay una correcta transformación digital en la Unión Europea.

Las leyes que están usándose en la actualidad empezaron a aplicarse en 2013, y han permitido alcanzar los objetivos para la Agenda Digital y la Estrategia Europa 2020. No obstante, mucho ha cambiado en los últimos ocho años, y por ello ahora se hace necesario revisar diversos objetivos, como el garantizar 1 Gbps de velocidad a la mayor cantidad de ciudadanos posible. La pandemia ha demostrado que hace falta que todos los hogares tengan acceso a conexiones a Internet de alta velocidad para permitir el teletrabajo, así como para consumir contenido con la mejor calidad.

 

Fuente: UE | adslzone