El grupo militar que controla actualmente Birmania (Myanmar) ha prohibido multitud de medios a través de los cuales la población puede acceder libremente a la información. Así, además de imponer grandes restricciones en Internet, han prohibido por completo recibir televisión por satélite en el país.
Un año de cárcel o 265 euros de multa por usar satélite
El motivo para hacerlo es que afirmaban que había «organizaciones ilegales y agencias de noticias» que estaban emitiendo programas que amenazaban la seguridad nacional. En el caso de que pillen a alguien usando antenas satélite para ver la televisión, se enfrentarán a un año de cárcel o a una multa de 500.000 kiats, unos 265 euros.
Las señales satélite suelen ser una de las mejores formas de evitar la censura en un país, ya que poniendo una antena en cualquier parte es posible recibir una señal y acceder a canales saltándose la censura. Sin embargo, para hacerlo ahora será necesario ocultar y desmontar la antena, ya sean particulares o comunidades de vecinos.
Ocultar una antena no es fácil; sobre todo si se tiene en un edificio. En una casa puede ser más sencillo, ya que puede orientarse incluso desde una zona interna de la casa hacia una ventana donde esté el satélite geoestacionario del que se quieren obtener los canales. Con esto, ni siquiera con drones podrán ver la antena desde el aire.
Periodistas detenidos y canales prohibidos
La prohibición parece estar relacionada directamente con medios birmanos independientes como Democratic Voice of Burma (DVB) o Mizzima, que llevan ya dos meses operando vía satélite después de que el gobierno militar les quitará las licencias para emitir. Con esto, también eliminan de golpe el acceso a canales extranjeros que también pueden ofrecerle a los ciudadanos una opinión más realista sobre lo que está ocurriendo en el país, aislándoles aún más.
La prohibición de la libertad de prensa se sigue cobrando cada vez más víctimas, donde ya hay un total de 8 medios después de que 74 Media y Tachileik News hayan sido también prohibidos. A su vez, ya han sido arrestados 71 periodistas desde el 1 de febrero, muchos de ellos de otros países. Para arrestarlos, introdujeron una nueva ley de su código penal que establece que es un crimen hacer circular comentarios que generen miedo o divulguen noticias falsas en el país.
