Los archivos PDF se encuentran entre los más usados por miles de millones de personas en todo el mundo. Fue creado en 1993 por Adobe junto con Acrobat Reader, que sigue siendo el mejor programa para abrirlos. Por ello, la piratería está siempre al acecho, y Adobe está pendiente para reportar contenido y enviar demandas de DMCA para eliminar las copias pirata de webs y redes sociales.

Acrobat Reader 1.0: protegiendo software de museo

El caso más curioso le ha pasado a Mikko Hyppönen, Chief Research Officer de F-Secure, que normalmente comparte curiosidades sobre ciberseguridad en su cuenta de Twitter, entre otros contenidos. La semana pasada, Hyppönen comentó que había recibido una reclamación de DMCA por un tweet que publicó en enero de 2016 en el que ofrecía un enlace para descargar una copia de Acrobat Reader 1.0 para MS-DOS. Esta versión fue lanzada en junio de 1993, hace ya casi 28 años.

Cuando publicó el tweet en 2016, no hubo ningún problema ni reclamación. El problema vino cuando su cuenta secundaria de Twitter, que está configurada con un bot que republica automáticamente sus tweets de hace cinco años, republicó el tweet con el enlace a Acrobat Reader. Mientras que el tweet original está disponible, la cuenta que lo republicó ha sido bloqueada, y el tweet eliminado.

Las reclamaciones automáticas son un problema

La reclamación de DMCA fue enviada a Twitter por parte de Incopro, una de las empresas antipiratería que colabora con Adobe. En el enlace de Lumen Database, podemos ver cómo, además de tweet del bot, también aparece en la reclamación el enlace de 2016, sobre el que Twitter no ha decidido tomar ninguna acción.

Esta situación demuestra el peligro que tienen las reclamaciones de DMCA automatizadas, ya que los usuarios que comparten un enlace a una simple web son culpabilizados de piratería, cuando en realidad lo que debería perseguirse es a la propia web que enlaza o almacena un contenido. En este caso, estamos hablando de un programa que ya no le reporta ningún beneficio a Adobe, y que, en palabras de Hyppönen, debería estar en un museo y no ser susceptible de recibir reclamaciones de DMCA. Por ello, ha dicho que no va a borrar el tweet original. Adobe debería proteger las versiones más recientes de su programa (con funciones como comparar PDF), y no ir a detrás de quienes comparten enlaces a un software cuyo pirateo no les va a hacer perder dinero.

 

Fuente: TorrentFreak | adslzone