Nokia y SK Telecom han conseguido una latencia de sólo 2 ms a través de una red LTE

Y es que esa latencia es muy difícil de conseguir, incluso a través de la fibra óptica. A pesar de ello, las compañías involucradas en el diseño de productos para el 5G han conseguido latencias tan bajas como exige la especificación. El último logro ha llegado de la mano de SK Telecom y Nokia, que han conseguido una latencia de tan sólo 2 ms.

Así, SK Telecom, operador de Corea del Sur, ha anunciado hoy que han conseguido una latencia de sólo 2 ms entre un móvil y una estación base a través de redes LTE a través de “Uplink Pre-Scheduling”. Esto es un logro bastante particular, ya que la latencia del LTE actualmente se sitúa en unos 25 ms. De cara al 5G, las ciudades tendrán que tener conexiones de 1 ms de latencia con velocidades pico de hasta 20 Gbps y 10 Gbps de subida.

Esta baja latencia se exige por varias razones. La primera es que, además de que la velocidad de descarga de contenido es importante, también importa que ésta se empiece a realizar lo antes posible. En segundo lugar, de cara a dispositivos y vehículos autónomos, es vital que éstos se comuniquen entre sí lo antes posible.

La latencia tendrá mucha importante en los coches autónomos

Si suponemos un coche autónomo circulando a 150 km/h comunicándose a través de una red LTE, esto supone una latencia de 25 ms entre la comunicación de un coche a otro. En el tiempo en el que el coche recibe la señal éste ha recorrido un metro. Sin embargo, con 2 ms, la distancia recorrida hasta que recibe la información para tomar una decisión (por ejemplo, frenar si el coche de delante realiza una frenada brusca) es de sólo 8 centímetros hasta que la información es recibida.

También es importante esta baja latencia para el control a distancia de determinados productos, como ordenadores remotos o incluso drones. Gracias a una latencia tan baja, se pueden controlar drones de manera remota que permitan realizar tareas a decenas o cientos de kilómetros de distancia, como analizar zonas afectadas por catástrofes naturales.

SK Telekom consiguió en febrero 3,6 Gbps de velocidad de transferencia en un coche conectado circulando a 170 km/h. Mientras que es relativamente fácil conseguir velocidades elevadas con el 5G estando parado o en un laboratorio, en movimiento esto es mucho más difícil. Gracias a esto, los coches del futuro tendrán a su disposición grandes cantidades de información para mostrársela a los conductores y también para que los propios coches puedan evitar accidentes.

 

Fuente: ZDNet | adslzone