Debido a todo el bombo que desde hacía meses se le estaba dando en todo el mundo a este evento pugilístico, como era de esperar el éxito, al menos en lo que se refiere a la audiencia que generó, fue muy bueno. En principio el combate se retransmitió en canales de pago a lo largo de todo el globo, pero tal y como muchos temían, las fuentes de emisiones pirata también quisieron tener parte de su protagonismo ofreciéndolo de manera gratuita para todos aquellos que pudieran acceder a los diversos canales que se abrieron.
Tal y como os hemos comentado en otras ocasiones en el pasado, los emisores de contenidos pirata, gracias fundamentalmente a los últimos avances que el entorno de la piratería ha tenido, nunca lo han tenido más fácil que ahora. Y es que entre otros elementos, los dispositivos set-top-box, el tan comentado software Kodi y sus add-ons ilegales, los dispositivos móviles, o incluso las redes sociales, han facilitado mucho el compartir de manera sencilla y rápida todo tipo de contenidos de manera ilegítima con millones de usuarios.
Eso fue precisamente lo que ocurrió anoche y algunas de las razones por la que circularon varias fuentes pirata que estuvieron retransmitiendo, con mayor o menor calidad, la mayoría del combate, o su totalidad. Sin embargo y por lo que se ha podido saber, desde algunas de estas emisiones en ocasiones empezaron a aparecer en la pantalla de los usuarios una serie de códigos que en un principio no se sabía de dónde podían proceder. Tras algunas investigaciones que se han llevado a cabo, todo esto podría indicar que de alguna manera algunas fuentes legales han estado intentando averiguar la localización de los que estaban «robando» y retransmitiendo de manera ilegal el combate de boxeo entre Floyd Mayweather y Conor McGregor.
En un principio, aunque las cifras relativas a la repercusión legal de los televidentes que siguieron el evento a través de sus hogares no se sabrán de manera oficial hasta dentro de un tiempo, sin embargo es más que probable que haya sido un éxito masivo para los canales de pago de todo el mundo. Mientras que millones de clientes de estos canales pudieron seguirlo en directo, del mismo modo se especula con también cientos de miles o quizá incluso millones, también lo siguiesen a través de fuentes no oficiales y de modo gratuito.
Así, durante la pelea muchos de estos usuarios ilegítimos se dieron cuenta de que una inusual marca de agua se estaba incrustando en las retransmisiones. Estas marcas estaban compuestas por una serie de números y letras que llamaron la atención de muchos por no saber ni la procedencia ni la razón de todo ello. Esto es algo que se vino sucediendo en varias fuentes «ilegales» que estaban ofreciendo el combate, tal y como podemos ver en la capturas adjuntas, aunque en estas, parte del código ha sido difuminado antes de hacerse públicas para proteger a la fuente.
Misteriosa secuencia de números en la emisión pirata del combate de anoche
Las combinaciones de letras y números aparecieron brevemente en conjuntos de 20 a 23 pares de elementos, que permanecieron en pantalla durante buena parte de la emisión. Es evidente que llegados a este punto la gran pregunta que se han hecho muchos es la razón por la que fueron puestos allí y por quién. Dado que estos mencionados dígitos no aparecieron sobre la pelea propiamente dicha, sino más bien cuando la cámara se movía fuera del cuadrilátero, muchos piensan que estas cadenas de caracteres fueron puestas ahí por parte de algún organismo de radiodifusión de los que fueron autorizados para emitir la pelea de manera legal.
Si finalmente se demuestra la veracidad de todo ello, es más que probable que la secuencia de números permitiera que a estas fuentes legítimas rastrear la emisión ilícita de un determinado suscriptor o el set-top box vinculado a una cuenta en particular. Dado que ese suscriptor estaría reproduciendo ese contenido de forma ilegal y compartiéndolo a través de Internet, algo que evidentemente no está permitido, el código actuaría como un faro de localización y podría acarrear algunos problemas futuros para el individuo involucrado en todo ello.
Eso sí, otra pregunta que se hacen algunos es la razón de esto, ya que con toda la sofisticada tecnología disponible en 2017, estos códigos en forma de marcas de agua no deberían haber sido tan visibles y evidentes, a no ser que uno de sus objetivos fuese el de «advertir» al emisor de que estaba siendo detectado.
