Las filtraciones de datos son habituales, tanto en operadores como en otro tipo de empresas. No obstante, lo que debes saber es que no todos los ataques que derivan en una filtración de datos te tienen que afectar. Lo cierto es que, en muchas ocasiones, los hackers están interesados en otro tipo de información y no en los datos correspondientes a los clientes. Pero, por supuesto, esto no siempre es así, así que es mejor que sepas qué hacer si te encuentras en este tipo de situación.

Datos que se han filtrado

Primero de todo, incluso si un operador reconoce que se han filtrado datos de sus usuarios, la realidad es que no sabes de qué tipo de datos están hablando. Ni siquiera tienen que ser unos datos concretos para todas las personas. En un caso podría ser tu dirección de correo electrónico, pero quizá otra persona ha sufrido la filtración de su dirección física o cualquier otra información. Al mismo tiempo, tampoco tienes la seguridad de que se trate de información vigente, porque quizá el ataque se ha dirigido a una copia de seguridad antigua. Como puedes ver, hay muchos factores a tener en cuenta y lo que necesitas es información.

Para ello, lo mejor es ponerte en contacto directo con tu operador. Inicialmente es posible que tengan una información muy general del incidente, pero con el paso de las horas deberían estar en posición de atender a sus clientes de una manera más profunda.

De todas formas, como al principio no tienes seguridad de saber qué datos se han filtrado, lo mejor es que siempre te pongas en lo peor. Eso implica que cualquier dato o información que le hayas dado en alguna ocasión a tu operador, podría haberse filtrado. Algunos de estos elementos no deberían ser, al menos teóricamente, un gran problema, como tu dirección física o tu teléfono, pero piensa que también podría haber sido robado el número de tu tarjeta de crédito, los datos bancarios o tu contraseña de acceso a la cuenta de usuario. Tener eso en cuenta te lleva directamente a la segunda acción que tienes que hacer: reforzar tu seguridad.

Protege tu privacidad

Tanto si tienes confirmación de los datos que se han filtrado como si estás intentando poner el barco a flote y garantizar la máxima seguridad posible, hay una serie de pasos a seguir. Si lo que se ha filtrado son tus datos personales, mucho ojo, porque te expones a que tu identidad sea suplantada. Y aunque esto ha ocurrido en más ocasiones en Estados Unidos que en otros lugares, quienes lo han sufrido hablan de un periodo de su vida terrible que no olvidarán fácilmente. Si alguien tiene las imágenes del DNI que quizá le mandaste a tu operador, así como tus demás datos, podrían ocupar tu identidad y ponerte en serios problemas. Incluso podrían llegar a conseguir tu número de la Seguridad Social, con todo lo que eso implicaría.

No hay una solución concreta para esto, pero lo mejor es que te mantengas alerta. Para ello, busca tu nombre y apellidos en Google de vez en cuando a fin de descubrir si alguien se está haciendo pasar por ti. También podrías buscar la imagen de la foto de tu DNI en Google Imágenes por medio de la búsqueda inversa. Quizá te sorprendas encontrando alguien que está usando tu foto y posiblemente tus datos para inscribirse en páginas de distintos estilos.

La filtración de tu teléfono y dirección de correo electrónico posiblemente generará una oleada de spam que verás venir y para la cual tendrás que estar preparado haciendo bloqueos de números y eliminando correo basura. También es posible que haya alguien que intente usar tu correo, por lo que lo primero que debes hacer es cambiar la contraseña. Si no tienes una dirección de recuperación configurada, pon una y así tendrás doble seguridad.

Por supuesto, se podrán haber filtrado todas tus contraseñas relacionadas con el operador. Y en muchos de los casos esas contraseñas coinciden con la de tu correo electrónico o con servicios que tengas contratados. Cambia todas las contraseñas que puedas lo antes posible. Piensa que los hackers son listos y están acostumbrados a atar cabos. Si saben tu contraseña del operador la probarán en tu correo electrónico, en tu cuenta de Netflix o en cualquier otro servicio adicional. Por último, habla con tu banco para informarte de las medidas de seguridad que tienen para este tipo de situaciones, dado que no sabes si tu tarjeta de crédito caerá en malas manos. Una anulación de la misma lo solucionaría todo con rapidez, pero en ocasiones no llega a ser necesario.

Pon una denuncia

Cuando ya tengas la información completa del incidente y puedas informar de ello a las autoridades, reporta el incidente de ciberseguridad del cual hayas sido víctima. Tendrás que poner una denuncia que ayudará a que tus datos e informe queden registrados a fin de poder tomar medidas en el futuro si algo ocurriera con tu información. Si alguien suplanta tu identidad o utiliza tus tarjetas de crédito, la denuncia que pusiste en su momento servirá como prueba que haría que las autoridades ya estuvieran al corriente de ello.

Después de esto ya habrás terminado con lo que podías hacer y tendrás que quedar a la espera de noticias oficiales por parte de tu operador para ver cómo se soluciona todo. No olvides asegurarte de que tus contraseñas estén cambiadas y, ante todo, mantente alerta por cualquier cosa rara que pudiera pasar con tus cuentas. Asimismo, ante todo, no entres en pánico, porque eso a veces te expone a cometer errores. ¡Mucho ánimo!

 

Fuente: adslzone