En la presentación de resultados a inversores remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Movistar explica que pondrá en marcha junto a Telefónica Infra la creación de una FibreCo con el objetivo de alcanzar 5 millones de unidades inmobiliarias (UUII, es decir, viviendas, locales y oficinas) en zonas más remotas. De paso, acelerarán la desaparición del ADSL.
Anticipo del apagado del cobre
Al cierre de 2021, Movistar cubría con su red de fibra más de 26,9 millones de unidades inmobiliarias en España, frente a los 25,21 millones del año anterior, lo que demuestra su compromiso con el paso a fibra de prácticamente todo su negocio de cobre.
Mediante este plan de expansión de fibra a zonas rurales, Telefónica acelerará el cierre del cobre de su fecha prevista, 2025, a 2024. Para finales de ese año, Telefónica habrá cerrado 2.854 centrales ADSL. Desde el inicio del proceso de apagado del cobre en 2015, la compañía ha iniciado el cierre de 1.443 centrales, lo que le ha supuesto un ahorro energético de 1.000 GWh debido al menor consumo de la fibra.
La intención de la operadora para desarrollar esta FibreCo pasaría por dar entrada a un socio financiero. Telefónica poseerá el 55% de la nueva empresa a través de Telefónica Infra, dejando el 45% restante en manos de ese socio inversor todavía por concretar.
Planes similares en otros países
Planes similares se han desarrollado en el pasado en otros países, con una asociación en Alemania que puede servir como referencia sobre la operativa que se llevará a cabo en España con tal que se encuentre a ese socio inversor.
En 2020, Telefónica y Allianz se asociaron para desplegar fibra en Alemania a través de una plataforma mayorista, cada una con el 50% de participación en la compañía, bajo un modelo de co-control. Se trataba de una plataforma mayorista, independiente y de acceso no discriminatorio, enfocada en el despliegue de fibra en zonas rurales y semirrurales de Alemania, con un volumen de inversión de aproximadamente 5.000 millones de euros, distribuidos a lo largo de los siguientes 6 años.
La nueva compañía tenía como objetivo desplegar más de 2 millones de hogares pasados en zonas rurales y semirrurales, a través de una red de fibra de más de 50.000 kilómetros, al tiempo que genera beneficios medioambientales a través de operaciones energéticamente eficientes y posibilita la transición a la fibra en las zonas de despliegue. Como vemos, los planes para España son bastante más del doble de ambiciosos en cuanto al número de hogares que se ha marcado como objetivo.
En América del Sur, Telefónica se ha asociado con CDPQ en Brasil, y en Colombia y Chile, con KKR. Estos planes también podrían llegar a otros territorios europeos como Reino Unido, donde Telefónica y su socio Liberty Global también están negociando la entrada de un socio financiero en su FibreCo.
Fuente: adslzone
