Alrededor de 3 mil millones de personas no tienen conexión a Internet. Y, muchas otras, tal y como explican desde la empresa Astranis, todavía dependen de las redes 2G. Por ello, esta entidad se ha propuesto conseguir que su Internet por satélite llegue más lejos y que, además, se ofrezca a un precio tan jugoso que todo el mundo lo pueda contratar. La principal víctima de su posible éxito será Starlink, al menos si la empresa de Elon Musk no se pone las pilas.

Tendrán mayor cobertura que Starlink

Starlink ya ha demostrado el potencial que tiene proporcionar Internet por satélite y tanto su servicio como sus precios están consiguiendo tener cada vez mayor popularidad. Todavía no son un estándar ni se ven como una norma en el mercado, pero están asentando una base que, en el futuro, podría llegar a evolucionar en algo mucho mayor.

Astranis tiene la intención de partir de ese trabajo y de mejorarlo. El principal motivo de ello es que no se van a limitar a lanzar sus satélites de Internet a la órbita baja de la Tierra, que es el lugar donde se encuentran los de Elon Musk. Lo que hará esta empresa será enviarlos a una órbita geoestacionaria. La principal diferencia entre ambos tipos de órbita radica en la distancia a la que están. Mientras la órbita baja se encuentra entre 150 y 400 km de nuestro planeta, la órbita geoestacionaria se eleva hasta los 36.000 km. Por ello, se puede apreciar una diferencia enorme.

En términos prácticos, esa diferencia de distancia tiene un significado muy claro: conseguir aportar mayor cobertura al cubrir una distancia de espacio superior. Por lo tanto, los satélites de Astranis podrán proporcionar su servicio de Internet en muchos más lugares y con una flexibilidad superior. Al mismo tiempo, también implicará otra ventaja: Astranis no tendrá que lanzar tantos satélites como Starlink. Y eso seguro que alegra a los astrónomos, quienes ya se han quejado de la “contaminación” que está generando la empresa de Elon Musk y de lo mucho que molestan sus satélites para la observación.

¿Qué velocidad proporcionarán?

Se espera que su servicio de Internet por satélite Omega esté disponible a partir de 2026. Por el momento ya se han realizado algunas pruebas y comprobado los niveles de velocidad que pueden proporcionar. Hace un año lanzaron un primer satélite a modo de prueba, pero se trataba de un modelo antiguo y no de las versiones Omega que acaban de presentar hace unos días. Ese primer satélite se encontró con ciertos problemas que impidieron que pudiera empezar a proporcionar Internet como estaba previsto. No obstante, todo entra dentro de lo que ya esperaban en Astranis que podría ocurrir.

Los próximos satélites se lanzarán en un plazo de dos años, de 2024 a 2026, e implicará que habrá un total de nueve unidades en órbita para proporcionar Internet. Se sabe que ofrecerán un ancho de banda de 50 Gbps y, aunque no se han desvelado tarifas, en principio debería tener un precio popular. Con estos satélites Omega mejoran el rendimiento, puesto que sus anteriores modelos solo ofrecían una velocidad de hasta 12 Gbps.

No obstante, el lanzamiento de los satélites Omega lo ven como una gran oportunidad. Quieren llevar Internet a todos los lugares donde todavía no está disponible y garantizar un buen rendimiento. Su proyecto se asienta en dos oportunidades importantes, siendo la primera que los lanzamientos de satélites son, en la actualidad, mucho más económicos que en el pasado. La segunda es que han fabricado estos satélites para que tengan una durabilidad de entre 8 y 10 años, así que será un proyecto rentable tanto a corto como a largo plazo.

El único factor que juega en contra de Astranis es también su gran ventaja: la distancia de la Tierra. Porque si bien van a cubrir mucho más espacio, también es cierto que su Internet no será el más conveniente en procesos que requieran latencia baja. Así, por ejemplo, no nos podríamos plantear contratar este servicio de Internet por satélite para jugar online, aunque sí sería eficiente en otro tipo de procesos.

 

Fuente: BigThink | adslzone