Una enfermedad común, un accidente doméstico o una caída en bicicleta son situaciones normales a las que nos podemos enfrentar en nuestro día a día. Y, por ende, conocemos el protocolo de actuación que debemos seguir cuando llegan. Sin embargo, cuando viajamos, cualquiera de las situaciones mencionadas previamente pueden comprometer considerablemente nuestra tranquilidad. Especialmente si no hemos sido lo suficiente precavidos para contratar un seguro de salud.
Por suerte, los países europeos cuentan con la posibilidad de que los ciudadanos de este continente podamos tener cobertura médica gratuita en cualquier país de la Unión Europea. Aunque, eso sí, para poder disfrutar de ella es necesario haber solicitado la haber solicitado la Tarjeta Sanitaria Europea Sanitaria Europea. Te contamos cómo conseguirla.
Los servicios sanitarios cubiertos
Una de las dudas más frecuentes por parte de los ciudadanos es lo relativo a los servicios médicos cubiertos y las diferencia saque nos ofrece con respecto a un seguro médico privado. La Tarjeta Sanitaria Europea acredita el derecho a recibir todo tipo de prestaciones sanitarias desde un punto de vista médico, siempre y cuando se produzcan durante una estancia temporal en cualquier territorio que se encuentre dentro del Espacio Económico Europeo, Reino Unido o Suiza. Con independencia de que el objetivo de la estancia sea turismo, una actividad profesional o un programa de estudios.
Además, si estamos planeando solicitarla para viajar esta Navidad o en el Puente de la Constitución, todavía estamos a tiempo. Puesto que la tarjeta se envía siempre en un plazo no superior a los cinco días desde el momento en el que se solicita a través de internet. Por último, conviene tener en cuenta que no es necesario tener certificado digital para solicitarla, como veremos en el siguiente apartado. Por lo que no tendremos excusas para no solicitarla y viajar con ella con la máxima tranquilidad.
Cómo solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea
Solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea es muy sencillo. Lo único que tenemos que hacer es acceder a la página que la Seguridad Social tiene dedicada para ello y escoger alguna de las tres vías que nos ofrece. Si contamos con Certificado Digital, debemos acceder a este enlace e identificarnos con nuestro certificado. Acto seguido, tendremos que rellenar los datos de envío y, de manera gratuita, podremos recibir la Tarjeta Sanitaria Europea en nuestro domicilio.
Si no contamos con Certificado Digital, tenemos dos opciones más. La primera de ellas es por medio de SMS. Tendremos que introducir nuestro número de teléfono y seguir todos los pasos que la página de la Seguridad Social nos va solicitando. Además, en este caso no solo podremos solicitarla para nosotros mismos, sino que también podremos actuar como apoderado o representante en el desplegable que se encontrará en la parte inferior.
La segunda de las opciones es muy similar a la anterior, pero, en este caso, sí que necesitaremos el nombre de usuario y la contraseña de Cl@ve PIN. Acto seguido, podremos corregir cualquier dato de envío que sea necesario y, una vez confirmado todo, apenas unos días más tarde recibiremos nuestra tarjeta.
Fuente: adslzone
