En 2020 comenzó la tormenta perfecta. Las fábricas, esperando que la demanda cayese en picado, cerraron. Las grandes empresas del mercado contrataron menos capacidad a los fabricantes de chips esperando una caída de la demanda, como es el caso del mercado automovilístico. Sin embargo, la demanda no cayó tanto, y todos los que no contrataron capacidad se vieron en una compleja situación donde, si querían recibir nuevos chips, tenían que ponerse a la cola y esperar semanas o meses de retraso.

Va a aumentar el número de fábricas

Mucha gente se tuvo que quedar en casa encerrada, lo que disparó la demanda de ordenadores y televisores, por lo que parte de la producción se orientó a ellos. A finales de 2020, las criptomonedas volvieron a dispararse, haciendo que las tarjetas gráficas empezasen a escasear. Un año después, el problema está lejos de solucionarse.

Para 2022, las expectativas no son nada halagüeñas. Hace unos meses, había quien afirmaba que, de cara al verano, la escasez iba a empezar a solucionarse. Por desgracia, los efectos parece que van a seguir extendiéndose, ya que, quienes están esperando para comprar productos actualmente van a hacerlo en cuanto haya stock. Eso, unido a otros factores, va a hacer que la escasez siga con nosotros por lo menos otro año más.

tsmc

Lo que sí es cierto es que la escasez no va a ser igual a lo largo del año. Para la primera mitad vamos a seguir como hasta ahora, pero para la segunda mitad del año puede que se suavice ligeramente, según afirman empresas como Samsung, Qualcomm o AMD. Los fabricantes han aumentado la capacidad de fabricación, y en 2022 y en los próximos años van a ir abriéndose nuevas fábricas de chips en todo el mundo, incluyendo en Europa.

En 2021, empezaron a construirse 19 nuevas plantas de fabricación de chips, y comenzarán a montar otras 10 en 2022. De esas 29 fábricas, China tendrá 8, Taiwán otras 8, América tendrá 6, y Europa y Oriente Medio tendrán 3. Corea del Sur tendrá 2 y Japón otras 2 nuevas. Todas ellas tendrán una capacidad de fabricar 2,6 millones de obleas de un tamaño equivalente de 200 mm.

La mayoría de ellas no empezará a instalar nuevo equipamiento hasta 2023, aunque algunas sí podrán a empezar a operar este mismo año. El problema es que la demanda va a seguir creciendo, así que hasta que no estén todas plenamente operativas no podremos empezar a vislumbrar la vuelta a la normalidad.

AMD da esperanzas sobre el stock de PS5

En el caso de PS5, las últimas cifras de ventas muestran que Sony ha vendido 14,5 millones de unidades hasta noviembre. Para finales de marzo de 2022, Sony quería haber distribuido 22 millones de unidades, pero probablemente la cifra sea algo más baja porque el stock de chips sigue siendo bajo.

Desde AMD, que fabrican la GPU y CPU de PlayStation 5, afirman que no sería extraño que, a partir de otoño de 2022, pudiera ser posible comprar una PS5 sin problemas de stock en tiendas online y grandes superficies. Por ello, parece que de cara a la segunda mitad del año hay esperanzas de que el stock aumente. Mientras tanto, habrá que estar atento a cuando las tiendas online lancen stock, ya que las unidades suelen durar pocos minutos disponibles hasta que se agotan.

 

Fuente: adslzone