Microsoft Fluent Design System: se confirma el nuevo Project Neon

Hemos mencionado en varias ocasiones a Project Neon, y a algunos de sus nuevos diseños para prácticamente todo el sistema operativo. Algunas aplicaciones de Windows 10 estaban ya recibiendo pequeños efectos “blur” o desenfoque en algunas partes, a modo de introducción de este nuevo rediseño.

Microsoft Fluent Design System añade básicamente dos nuevos factores a la interfaz de Windows 10: transparencias con blur y animaciones. Esta plataforma está creada sobre el Microsoft Design Language 2 (MDL2). El 2 viene de que la primera versión de ese lenguaje es lo que todos conocíamos como la interfaz Metro, que tuvo que cambiar de nombre por disputas legales con una cadena de supermercados alemana.

Algo parecido ha ocurrido con Neon, nombre que al parecer ya estaba utilizando otra empresa. Por este motivo, Microsoft ha decidido llamarlo directamente Microsoft Fluent Design System, que, conociendo lo que les gusta a los angloparlantes abreviar palabras, conoceremos de aquí en adelante como MFDS.

Arreglando errores del pasado, y copiando lo bien que Google lo ha hecho con Material Design

La nomenclatura utilizada en el nombre es clave, ya que centra la Fluidez y el Diseño como los dos aspectos que más atacará este nuevo sistema, destinados a potenciar la velocidad de uso y la interacción del sistema. El sistema está diseñado para funcionar entre todo tipo de plataformas, ya sea móvil, tablet, ordenador o consola.

La nueva interfaz se caracterizará por un diseño ligero, con interfaces sencillas y poco recargadas que centren la atención en lo que tiene que estar, mejor interacción entre elementos, aprovechamiento más eficiente de la pantalla, y mejorar la facilidad de uso con los dispositivos de entrada como teclado, ratón o mandos.

Este nuevo enfoque para la interfaz recuerda al Material Design que encontramos en los móviles Android, donde se prioriza el diseño y el movimiento con animaciones fluidas, aportando un aire de cohesión al sistema operativo, el cual se criticó que inicialmente no tenía hasta que se introdujo Material Design.

A diferencia de lo que hizo Google, Microsoft no ofreció unas guías determinadas para que los desarrolladores crearan sus aplicaciones en base a una misma interfaz. Además, algunas de sus aplicaciones pecan de ser demasiado simples y vacías con una baja interacción.

En definitiva, Microsoft se compromete a hacerlo mejor este nuevo Microsoft Fluent Design System. De primeras, lanzarán sus aplicaciones con este nuevo diseño con interfaces mejor diseñadas y una mejor funcionalidad, que posteriormente copiarán aplicaciones de terceros. En los próximos meses iremos viendo cómo aparece este nuevo diseño para las aplicaciones del sistema, que culminará con el lanzamiento global en la Windows 10 Fall Creators Update que veremos en otoño. Posteriormente, se dará un nuevo salto a nivel de diseño, pero habrá que esperar a Redstone 4 en marzo de 2018.

 

Fuente: adslzone