Aunque es poco conocido, la configuración del sistema (también conocida como msconfig) tiene una opción que nos permite configurar el arranque de nuestro sistema. Una de las opciones que podemos configurar desde aquí es que en el próximo reinicio el sistema arranque en modo seguro en lugar de arrancar normalmente. De esta manera evitaremos tener que pulsar la tecla F8 durante el arranque y los usuarios con UEFI y Secure Boot podrán acceder sin problemas a este modo del sistema.
Para configurar un arranque seguro lo primero que debemos hacer es abrir la ventana de ejecutar pulsando las teclas Win + R (o en el botón de inicio hacemos click derecho con el ratón) y en la ventana de ejecutar escribimos “msconfig” (sin comillas).
Pulsamos enter y nos cargará una nueva ventana de configuración del sistema.
Desde esta ventana podemos configurar el modo de inicio y arranque del sistema operativo. Para elegir la opción de arrancar en modo seguro debemos pulsar sobre la pestaña “Arranque” de la parte superior y veremos un apartado similar al siguiente.
En la parte inferior de la ventana podemos ver “Opciones de arranque“. Para elegir que nuestro sistema cargue en el próximo reinicio en modo seguro simplemente debemos marcar la opción “Arranque a prueba de fallos” y elegir el tipo de arranque que queremos, por ejemplo, “Red” para tener también conexión a Internet.
Desde aquí también podemos configurar otra serie de ajustes como un arranque sin interfaz, guardar un registro de todo el arranque, utilizar los gráficos base o utilizar sólo la información de arranque del sistema operativo.
Por defecto estos cambios sólo serán válidos por una vez de manera que al reiniciar desde el modo seguro volveremos al modo normal (de no ser así simplemente debemos volver a abrir msconfig y desmarcar la opción que hemos marcado antes para arrancar a prueba de fallos). También podemos forzar al sistema a hacer los cambios constantes marcando la opción de “Convertir en permanente la configuración”.
Lo único que nos queda por hacer es aplicar los cambios y reiniciar nuestro ordenador para ver cómo automáticamente entramos al modo a prueba de fallos desde donde podemos intentar solucionar posibles problemas que pueda haber en nuestro sistema operativo.
Fuente: softzone