El medio de comunicación Forbes ha tenido acceso a unos informes judiciales ahora desclasificados en el que se afirma que Google cedió datos de algunos usuarios de YouTube.  En su artículo, informan que, como parte de una investigación criminal, unas autoridades federales de EEUU obligaron a la tecnológica a entregar nombres, direcciones, números de teléfono y actividad de ciertas cuentas de su plataforma de vídeo.

En concreto, los datos de usuario que se facilitaron a la policía estaban relacionados con vídeos publicados por un internauta que se hacía llamar ‘elonmuskwhm’. Su contenido tenía más de 30.000 visualizaciones y se estima que varios miles de cuentas no estaban relacionadas con el caso que se investigaba.

¿Qué había de ilegal en los vídeos vigilados?

El usuario ‘elonmuskwhm’ subía tutoriales a YouTube de mapeo a través de drones y software de realidad aumentada. Aparentemente este contenido no era ilegal, pero los investigadores federales lo vigilaban por lo que podría llegar a esconderse detrás de los mismos.

Según los documentos filtrados, había sospechas de que el internauta estaba lavando dinero a través del negocio de las criptomonedas. El informe recoge que ‘elonmuskwhm’ estaba vendiendo Bitcoin (la moneda virtual de más valor en el mercado) a cambio de dinero en efectivo.

Esta práctica ilegal que, en teoría, estaba realizando lo ponía en el punto de mira de las autoridades. Eso afectaba a todas las cuentas que veían su contenido público también que, como hemos mencionado, no estaba relacionado con sus actos delictivos.

La información que se ha dado a conocer por Forbes detalla que, a principios de enero del año pasado, las autoridades pidieron información privada sobre los usuarios que consumían sus vídeos a Google. «Hay razones para creer que estos registros serían relevantes y materiales para una investigación criminal en curso, incluso al proporcionar información de identificación sobre los perpetradores», aseguraban en su solicitud.

La cesión de datos debía ser secreta

La petición de información por parte de la policía a Google fue aprobada por el tribunal. Sin embargo, se exigió a la compañía de Mountain View que lo ocultasen y no lo hiciesen público.

Según ha aclarado un portavoz de Google en Forbes, siguen un «proceso riguroso» para apoyar el trabajo de las fuerzas del orden mientras protegen la privacidad y los derechos constitucionales de sus consumidores. «Examinamos cada demanda de validez legal, de acuerdo con la jurisprudencia en desarrollo», explica la fuente. Además, detalla que Google rechaza «rutinariamente las demandas de datos de usuario demasiado amplias o inapropiadas, incluida la objeción a algunas demandas por completo».

Desde Forbes, no han podido confirmar si finalmente los datos se cedieron para la investigación. En caso afirmativo, la información que se hubiese dado de manera secreta correspondería a los espectadores de los vídeos de ‘elonmuskwhm’ del 1 de enero al 8 de enero de 2023.

Esta no sería la primera vez que se exige a Google facilitar información de los usuarios de YouTube a las autoridades. Ya ocurrió con el caso de New Hampshire en el que la policía solicitó los datos de quienes vieron una transmisión en vivo en la que hubo amenazas de bomba.

John Davison, abogado principal del Centro de Información de Privacidad Electrónica, se muestra preocupado en Forbes ante estas peticiones de datos de los usuarios. «Lo que vemos en línea puede revelar información profundamente sensible sobre nosotros: nuestra política, nuestras pasiones, nuestras creencias religiosas y mucho más», explica.

 

Fuente: Forbes | adslzone