El despido de Sam Altman de OpenAI ha dinamitado todo. No solamente porque han perdido al CEO que ha dirigido esta historia de éxito en los últimos tiempos, sino que la práctica totalidad de la plantilla se ha volcado en apoyo con él y amenazan con irse con su exjefe a Microsoft.

Malestar en OpenAI

La empresa OpenAI es la que controla dos de las grandes herramientas de Inteligencia Artificial y de las más usadas por todo el mundo: GPT-4, el modelo detrás de ChatGPT y DALL-E, el popular generador de imágenes.

Esta empresa, a pesar del buen momento que parece atravesar, ha estado en boca de todos en las últimas horas debido al efecto dominó que podría tener el despido de Sam Altman como director ejecutivo. Este movimiento por parte de la junta directiva no ha gustado y la mayor parte de la plantilla de la compañía amenaza con irse si no se repone a Altman como CEO.

Tras el nombramiento de Emmett Shear como el nuevo CEO de OpenAI, los empleados han emitido una carta a la junta directiva en la que amenazan con abandonar a los responsables de ChatGPT si no se toman medidas al respecto.

ChatGPT en peligro

¿Podría funcionar una compañía tecnológica con solamente un 5% (o menos) de su personal? Esa es la gran pregunta que nos podríamos hacer, pues así serían las cosas con ChatGPT de cumplirse esta renuncia masiva.

A la junta directiva de OpenAI,

OpenAI es la empresa de IA líder en el mundo. Nosotros, los empleados de OpenAI, hemos desarrollado los mejores modelos y llevado el sector a nuevas fronteras. Nuestro trabajo sobre seguridad y gobernanza de la IA da forma a las normas globales. Los productos que construimos son utilizados por millones de personas en todo el mundo. Hasta ahora, la empresa para la que trabajamos y apreciamos nunca ha estado en una posición más fuerte.

El proceso mediante el cual ustedes despidieron a Sam Altman y eliminaron a Greg Brockman de la junta directiva ha puesto en peligro todo este trabajo y socavado nuestra misión y nuestra empresa. Su conducta ha dejado claro que ustedes no tienen la capacidad para supervisar OpenAI.

Cuando todos nos enteramos inesperadamente de su decisión, el equipo de liderazgo de OpenAI actuó rápidamente para estabilizar la empresa. Escucharon atentamente sus inquietudes y trataron de cooperar con ustedes en todos los aspectos. A pesar de muchas solicitudes de hechos específicos para sus acusaciones, nunca han proporcionado ninguna prueba escrita. También se dieron cuenta cada vez más de que ustedes no era capaces de desempeñar sus funciones y que estaban actuando de mala fe.

El equipo de liderazgo sugirió que el camino más estabilizador a seguir (el que mejor serviría a nuestra misión, a la empresa, a las partes interesadas, a los empleados y al público) sería que ustedes renunciaran y establecieran una junta calificada que pudiera liderar a la empresa hacia adelante con estabilidad.

El liderazgo trabajó con ustedes las 24 horas del día para encontrar un resultado mutuamente aceptable. Sin embargo, dos días después de su decisión inicial, volvieron a sustituir a la directora ejecutiva interina Mira Murati en contra de los mejores intereses de la empresa. También informaron al equipo de liderazgo que permitir que la empresa fuera destruida “sería coherente con la misión”.

Sus acciones han dejado en claro que son incapaces de supervisar OpenAI. No podemos trabajar para o con personas que carecen de competencia, criterio y cuidado por nuestra misión y nuestros empleados. Nosotros, los abajo firmantes, podemos optar por renunciar a OpenAI y unirnos a la recientemente anunciada subsidiaria de Microsoft dirigida por Sam Altman y Greg Brockman. Microsoft nos ha asegurado que hay puestos para todos los empleados de OpenAI en esta nueva filial en caso de que decidamos unirnos. Tomaremos este paso de manera inminente, a menos que todos los miembros actuales de la junta directiva renuncien y la junta designe a dos nuevos directores independientes principales, como Bret Taylor y Will Hurd, y reincorpore a Sam Altman y Greg Brockman.

Por el momento, la práctica totalidad de la empresa ha firmado el comunicado que podéis leer sobre estas líneas. Se estima que más de 730 personas de las 770 que componen actualmente la plantilla. El fichaje de Altman por Microsoft no es un trato cerrado y la idea sería regresar a OpenAI. Desde luego, es un gran acto de presión para que las cosas vuelvan al cauce de éxito que ha tenido OpenAI en este 2023 y que está a punto de estallar por los aires.

 

Fuente: adslzone