Darle una segunda vida a un ordenador cuyo sistema operativo ya no recibe actualizaciones de seguridad es una muy buena idea. Lo cierto es que hay personas que compran equipos baratos para ello, pero tú puedes aprovechar ese PC que ya no vas a utilizar en el día a día. Ya verás cómo alguna de estas ideas te convence.
Servidor de streaming
En estos tiempos en los que los servicios de streaming están cambiando tanto y subiendo los precios, comienza a ser interesante de nuevo poner al día nuestra colección de películas y series en formato digital. Y la mejor manera de disfrutarlas entre varias personas y con mucha comodidad es recurrir a establecer un servidor de streaming que pueda utilizar los archivos. Puedes utilizar tanto tus DVD originales para que sus archivos estén disponibles como las versiones digitales que hayas comprado en las principales plataformas.
Si quieres un sistema muy cómodo, lo único que tienes que hacer es usar un programa como Plex. Como seguro que has vaciado el disco duro de tu antiguo ordenador, tendrás amplia cantidad de espacio para poner todos los contenidos que quieras tener en el servidor.
Servidor de almacenamiento NAS
Aunque sigue la misma línea de la idea que te hemos dado en el punto anterior, en este caso un servidor NAS será mucho más flexible y lo podrás utilizar para almacenar, guardar y compartir cualquier tipo de archivo que quieras. Es la mejor alternativa por la que puedes optar si no quieres depender únicamente de la nube. Al fin y al cabo, no olvides que el acceso a los archivos en los servicios de nube requiere algo muy sencillo, pero que no siempre tenemos disponible: conexión a Internet.
Necesitarás usar software para establecer servidores NAS y leer algún que otro tutorial. No obstante, más allá de eso no es algo que resulte tan complicado como puede parecer a primera vista. También te recomendamos, en este caso, que, si tienes la oportunidad, le pongas algún disco duro adicional a tu ordenador. Eso garantizará que el servidor se pueda convertir en una pieza clave en el almacenamiento de tus archivos.
Máquina recreativa
Hace unos años se puso de moda la idea de utilizar una Raspberry Pi para llenarla de juegos y tener, al instante, tu propia máquina recreativa en casa. Fue el sueño hecho realidad de muchos niños que crecieron en los años 80 y 90. Pero nosotros te vamos a decir que, en realidad, no te tienes que complicar con uno de esos dispositivos. Tu ordenador obsoleto va a ser perfecto y lo más probable es que te proporcione un rendimiento incluso superior, así que sería una opción perfecta.
A nivel de software, lo único que tendrás que hacer será poner los emuladores o juegos correspondientes. Pero lo más importante será en cuanto a cómo prepararás el PC. Porque lo que puedes hacer es usar el ordenador como las «tripas» de la máquina y luego construir tu propio mueble. Para ello hay multitud de tutoriales que circulan por la red y que puedes seguir sin necesidad de ser un maestro carpintero. Si no te quieres liar, en páginas como Amazon se suelen vender, así que solo tendrás que poner luego la pantalla y el ordenador. O incluso, en muchos casos, la pantalla ya está incluida, así que no va a ser nada complicado.
Servidor de juego dedicado
Tanto si juegas a títulos actuales como Minecraft como si te gusta el retrogaming y echas de menos esas partidas de las que disfrutabas en LAN en los tiempos de Duke Nukem 3D, un servidor de juego es algo que te podría venir muy bien. Es ideal en el caso de que quieras mantener una infraestructura privada, cuando los juegos que te gustan ya no tienen servidores que estén online o si quieres disfrutar de otras experiencias.
Lo mejor de esto es que el servidor te garantizará la mayor velocidad y capacidad de acceso, así que tendrás la oportunidad de echar partidas memorables. La forma de hacerlo dependerá de cada juego, así que infórmate antes de qué es lo que quieres y cuáles son los requisitos.
Ordenador Mac
No es una de las mejores opciones en la actualidad porque se han reducido mucho las posibilidades que hay para que puedas transformar tu ordenador con Windows en un Mac a través del método Hackintosh. Pero es posible que tengas un equipo que disponga de las especificaciones que necesitaría, por lo que se podría acabar convirtiendo en una opción excelente.
El punto clave de este proceso que suena tan loco, pero que acaba siendo tan satisfactorio, es que puedas actualizar el ordenador con una versión de macOS que se encuentre activa. Así, al menos, extenderás un tiempo el periodo en el cual tu equipo no estará obsoleto. Es posible que acabe llegando antes o después, pero lo habrás aplazado un poco y, al mismo tiempo, probado la alternativa de Apple a Windows.
Y si nada te convence…
Lo mejor que puedes hacer en el caso de que no quieras buscarle una vuelta al uso de tu ordenador y que tampoco estés interesado en comprarte otro equipo, es pasarte al lado de Linux. La buena noticia es que seguirás usando tu equipo de una manera adecuada, que no tendrás que hacer cosas complicadas y que, además, dispondrás de muchos de los servicios y herramientas que tienes en Windows.
Con los años, Linux ha madurado y ha recibido todo tipo de funciones, herramientas y soporte de software. Por lo tanto, no vas a notar tantos cambios como pudieras imaginar. Antes de lanzarte a la piscina, instala una versión de Linux que sea sencilla, como una de sus distribuciones más recomendables, y pruébala en paralelo a la presencia del sistema operativo de Microsoft. Así verás si te puedes acostumbrar o no. Es posible que, incluso, le acabes cogiendo el gusto y que no quieras volver nunca a Windows. No serías el primero al que le pasa.
Fuente: adslzone
