El servicio Amazon Prime Air dio el pistoletazo de salida en 2022 en Estados Unidos. Los primeros meses fueron de calentamiento, para ver cómo avanzaba la idea, pero las previsiones para 2023 que se hicieron a inicios de año apuntaban a éxito. La tienda estimaba que, durante el presente año, haría 10.000 envíos con drones. ¿Quieres saber cuántos les faltan de momento a fecha de mayo? 9.900.

¿Qué ha pasado?

Acercándonos a la mitad de año Amazon solo ha gestionado 100 envíos con este servicio de drones que van volando a las casas de los clientes para repartirles sus pedidos. Pero quizá las cifras mejoren, aunque la empresa ya ha revisado sus previsiones y ya no espera alcanzar los 10 mil envíos. Hasta febrero las entregas acumuladas fueron 10, por lo que de febrero a mayo se han sumado 90. Por si te habías olvidado, estamos hablando de un servicio de Amazon, no de una pequeña tienda online que nadie conozca.

En general, hay mucho desconocimiento sobre lo que está pasando. La información llega a través de un profundo reportaje que ha realizado la CNBC donde han intentado arrojar luz sobre el misterio de un proyecto que debería haber causado más interés. No hay que olvidar que Amazon empezó con la idea de hacer repartos con drones hace más de 10 años. No es como para que, después de tanto esfuerzo y análisis de mercado, se encuentren en una situación tan crítica. Pero el equipo de investigación se ha encontrado con más misterios.

Posibles explicaciones

El servicio Prime Air está disponible, de momento, en dos localizaciones de Estados Unidos: Texas y California. Los periodistas han viajado hasta Lockeford, en California, que debería ser uno de los puntos centrales de la popularidad del servicio de reparto con drones. Al llegar, hablando con los ciudadanos y con algunos vecinos, se han encontrado con que parece que la gente quiere que le repartan paquetes volando, pero luego no se apuntan en el servicio para estar entre las familias que los reciban. ¿Por qué?

La respuesta parece estar en las limitaciones con las que se ha encontrado el servicio de Amazon, ya que no es tan sencillo como que sus empleados tengan licencias para drones. Las autoridades de Estados Unidos han puesto multitud de condiciones a la empresa para que controle el vuelo de los drones. Solo se pueden mover a través de determinados puntos y en condiciones muy concretas. Eso podría haber llevado, tal y como dicen algunos empleados de Amazon que quieren mantener el anonimato, a que solo dos casas de todo Lockeford tengan la capacidad de recibir paquetes con drones. Dos casas que están una al lado de la otra y que, además, se encuentran muy cercanas al almacén desde el que despegan los drones.

También es posible que haya cierta reticencia a confiar en los drones de Amazon debido a varios incidentes que hubo en el pasado, aunque la empresa ha confirmado que ninguno se ha producido durante un reparto. Esto podría explicar el motivo por el cual otras empresas de reparto con drones, como Zipline, sí que están haciendo miles de repartos en otras regiones del país. Esta entidad, por ejemplo, utiliza sus drones al servicio de Walmart y ya han llevado a cabo multitud de entregas con éxito. En la mayoría de los casos, los drones dejan el paquete en el jardín de la casa del cliente y se marchan, lo que es una ventaja para aquellas personas que no están en su domicilio durante el día.

Visto lo visto, lo que está claro es que Amazon tiene que revisar el trabajo que está haciendo, los problemas con los que se encuentra y el enfoque que está haciendo de está área de negocio. A todos nos gustaría imaginarnos en un futuro en el cual recibiéramos los paquetes por las ventanas como en El quinto elemento, pero el golpe de realidad de esta noticia nos hace imaginar que todavía vamos a tener que esperar mucho.

 

Fuente: CNBC | adslzone