Desde el estreno de la tecnología Surface en el año 2012 no ha dejado de ser el principal patito feo en el catálogo de la entidad cofundada por Bill Gates. Aunque el objetivo inicial era llegar a causar un impacto muy positivo en el mercado, sus tablets, ordenadores y otros dispositivos no han calado hondo entre los consumidores. Los datos que aparecen en el último informe económico de Microsoft lo confirman todavía más: salvar los muebles va a ser complicado.

Una caída del 30%

Para Microsoft, que en el último informe se haya registrado que la división Xbox solo haya crecido un 3% es algo que no se puede dar como positivo. Así que solo hay que imaginar la opinión que tienen los ejecutivos de la entidad sobre el resultado del -30% que ha sufrido la división de dispositivos, en la que se integra Surface. Esto tampoco oculta que los beneficios de Windows OEM, que se trata de los pagos que recibe la empresa por la instalación de su sistema operativo en equipos de venta al público, también se han reducido de forma drástica con un -28%.

Pero el principal problema, hoy por hoy, es Surface. Estos dispositivos táctiles, que incluyen tanto tablets como portátiles y pizarras interactivas, no terminan de despegar. La tecnología se presentó en su momento original con el Surface RT, un tablet al que le faltó empuje para convertirse en un estreno que hiciera historia en el catálogo de Microsoft. Con el paso de los años, la empresa se ha empeñado en seguir invirtiendo en estos dispositivos que están arropados actualmente por el sistema operativo Windows 11. Pero son muchos los expertos que creen que Microsoft debería empezar a ser consciente del callejón sin salida en el que se ha metido.

Sí es cierto que hay dispositivos Surface que resultan interesantes, que están bien fabricados y son ligeros, pero el mercado, simplemente, no parece interesado en ellos. Y cuando una marca se encuentra con un muro como este, es difícil que lo acabe superando a base de lanzar nuevos modelos de forma continuada. De ahí que la división haya perdido ese 30% de ventas y que se encuentre en situación crítica.

Algunos de los dispositivos que se incluyen en la gama Surface incluyen desde los tablets híbridos Surface Pro hasta los portátiles Surface Laptop o la pizarra Surface Hub. Como te puedes imaginar, sus ventas no son especialmente altas. Tampoco ayuda que el equipo de desarrollo de Microsoft haya invertido en proyectos que acabaran siendo cancelados de manera silenciosa, como el Surface Duo 3 de doble pantalla. Además, hay que añadir que dentro de la división de dispositivos, de la que forma parte Surface y ese -30%, también se incluyen los accesorios de PC que fabrica Microsoft y la tecnología de realidad aumentada Microsoft HoloLens. No obstante, el grueso de la división está ocupado por Surface, una realidad que es imposible maquillar de ninguna manera.

Otras divisiones sí están funcionando

De todas formas, en Microsoft mantienen la calma. El principal motivo de ello es que estos mismos resultados financieros han mostrado que otras de sus divisiones sí están alcanzando un alto nivel de éxito. Y así, las pérdidas que ha generado Surface han quedado cubiertas fácilmente gracias a los otros productos. De esta forma, por ejemplo, podemos comprobar que el negocio de ofimática orquestado alrededor de Office 365 ha crecido un 14% y que la división dedicada a la computación en nube de Azure ha crecido un sólido 27%.

También hay que destacar que hay crecimiento en la división dedicada a los productos de servidores, por lo que las cifras, en términos generales, no están siendo tan malas. En el caso de la red social profesional LinkedIn, uno de los productos que Microsoft también tiene en su posesión, el crecimiento en ingresos ha sido del 8%, pero la cantidad de sesiones se ha incrementado en un 15%. Además, LinkedIn está realizando muchos cambios con la misión de intentar ser un medio social más utilizado a lo largo del día por los profesionales.

Con todo ello se puede ver que Microsoft, en términos globales, no tiene que preocuparse por los ingresos, pero sí que deberá comenzar a tomar decisiones acerca de lo que hará con su división Surface en el futuro. La situación no pinta bien.

 

Fuente: adslzone