Las posibilidades que ofrece la Raspberry Pi son realmente altas. Una de las claves está en elegir el sistema operativo que se adecué al uso que queremos darle a la Raspberry Pi, ya que cada uno está enfocado en funciones tan diversas como crear un robot, una consola retro o controlar el gasto energético de nuestra vivienda.

Puntos débiles de la Raspberry Pi

Si acabas de iniciarte en el mundo maker comprando una Raspberry Pi es imprescindible que sepas que, aunque es una placa muy versátil que te permite desarrollar casi cualquier proyecto, también tiene sus limitaciones o puntos débiles que tienes que tener en cuenta antes de empezar a trabajar con ella.

Capacidad de almacenamiento

Comprar una tarjeta microSD es prácticamente imprescindible para ampliar la capacidad de una Raspberry Pi. Una opción sería utilizar una tarjeta microSD U3 que aporta mucha flexibilidad a la hora de ejecutar cualquier sistema operativo o aplicación de forma fluida. Al fin y al cabo, hay que tener muy presente que en la microSD estará el sistema operativo con el que vayas a trabajar y seleccionar un modelo lento hará que tu Raspberry Pi funcione con lentitud. Para superar las limitaciones de almacenamiento de la placa también se puede conectar la placa a una unidad NAS a través de un puerto Ethernet o conectar una unidad externa a través de los puertos USB con un adaptador.

Protege la placa

Las carcasas para Raspberry Pi hacen que el microordenador esté protegido y no sufre ningún daño. Dejando la placa y los componentes sin proteger corres el riesgo de que se llenen de polvo y suciedad siendo muy probable que la suciedad acabe haciendo mella en ellos. Además, una carcasa también se convierte en una forma original de darle personalidad a esta pequeña placa.

Necesidad de alimentación

La Raspberry Pi no contiene fuentes de alimentación integradas. Por regla general hay que otorgar una clasificación de miliamperios (mA) más alta de lo necesario, ya que el amperaje adicional puede evitar que la placa se reinicie cuando le agreguemos accesorios y circuitos externos. Una fuente de alimentación insuficiente podría dañar la Raspberry Pi o la tarjeta micro SD.

Bloqueos

A diferencia de un ordenador de escritorio, cuando algo no va bien mientras utilizamos la Raspberry Pi no tenemos la posibilidad de hacer Ctrl + Alt + Delete para restablecerla. Por otro lado, es inevitable que la Raspberry Pi se bloquee en algún momento mientras experimentamos con ella para crear nuevos proyectos. Por lo general esto es un problema, pero hay formas de lidiar con él. Una buena opción es hacerse con un cable de alimentación con interruptor de encendido y apagado integrado.

A pesar de las limitaciones que pueda tener una Raspberry Pi, la amplia comunidad de personas que la utilizan hace que sea fácil encontrar soluciones a la mayoría de las limitaciones. Aprovechando la abundancia de sugerencias y consejos de la comunidad se pueden obtener soluciones haciendo una búsqueda sencilla en el navegador o en cualquier grupo o foro de makers

 

Fuente: adslzone