Sin embargo muchos se preguntan si el extendido uso compartido de cuentas no debería ser un tema más prioritario para la propia compañía de los que lo es en estos momentos, ya que como hemos venido observando con el paso de los años, este es un tema que no parece ser demasiado importante.
Al hablar de compartir cuentas, como muchos sabréis no nos referimos a compartir entre los miembros de una misma familia, sino que nos referimos a una práctica que viola los términos de uso de Netflix, es decir, compartir una cuenta con amigos, vecinos, o extraños a través de Internet, gente con la que no vivimos. Esta es una práctica muy extendida, de hecho en estos momentos hay unos 24 millones de personas que hacen uso del servicio online, gratis, lo que debería ser preocupante para la firma, pero en realidad, no lo es.
Con el paso del tiempo hemos podido comprobar que este hecho no representa problema alguno para Netflix, aunque la cifra de cuentas compartidas vaya en aumento y su política lo prohíba, al menos la compañía no hace nada al respecto, por lo que todo lo relacionado con esta compartición queda impune. Así podemos compartir cuenta, y gastos, con los vecinos, con amigos, o con gente que viva en otros países, la plataforma nunca ha cancelado una cuenta por ello. De hecho el CEO de la firma deja entrever que estas prácticas es algo con lo que la empresa debe aprender a convivir, ya que hay muchas contraseñas legítimas, como la que compartimos con la pareja o un familiar legítimo, así que Netflix hace bien sin perseguir a los que las comparten de manera ilegítima.
Netflix no va a perseguir a los que comparten sus cuentas con extraños
Consideran que castigar a los que comparten cuentas no vale la pena, ya que si la compañía desarrollase un algoritmo para detectar a los que comparten, hay muchas posibilidades de que las familias también fuesen afectadas y suspendidas por error, lo que no da buena imagen. Por tanto prefieren hacer la vista gorda, lo que permite contratar planes premium que permiten ver contenidos en hasta cuatro dispositivos a la vez.
Todo ello a pesar de que esta compartición ilícita le cuesta a Netflix alrededor de 2.300 millones de dólares al año, según las últimas estimaciones, pero claro asumiendo que cada usuario «free» realmente pagaría por una cuenta si tuvieran que hacerlo, cosa que es poco probable. Pero claro, aunque solo un tercio de los que consumen gratuitamente se registrasen por obligación, la compañía ganaría 660 millones de dólares más cada año, lo que sigue sin compensar, bajo su punto de vista, todo a pesar de los 12.000 millones de dólares de deuda que tienen hoy día.
Y es que consideran que el poder compartir cuenta es otro de los grandes atractivos de Netflix con respecto a otros competidores directos y que al mismo tiempo les ayudará a luchar contra la llegada de Disney+ en unos meses, por lo que prohibir estas acciones sería un claro paso atrás para el crecimiento y distanciamiento de la plataforma frente a otras propuestas.
Eso sí, al tiempo que la empresa asegure que no se preocupa por la compartición de cuentas, también es posible que no tenga los recursos necesarios o lo suficientemente efectivos para encontrar y castigar a los que realmente rompen las reglas sin perjudicar a los usuarios legítimos. Y es que, como han hecho saber, si pusieran en marcha un algoritmo que detectara y prohibiera a los que comparten cuentas, podría castigar accidentalmente a los que comparten cuentas legítimamente, lo que sería injusto y perjudicial para la marca como tal. Sea como sea, de momento en pleno 2019 las cosas van a seguir tal y como están en este sentido, veamos lo que sucede en años venideros.
Fuente: adslzone
