Telegram ha cancelado la ICO de su criptomoneda Gram

Telegram había recaudado ya 1.700 millones de dólares de unos 200 inversores, lo que apuntaba a convertirse en una de las mayores ICO de la historia de las criptomonedas. Sin embargo, en lugar de lanzar una nueva criptomoneda, lo que van a hacer es lanzar una plataforma de pagos digitales llamada Telegram Open Network (TON).

El dinero recaudado también va a ser utilizado para seguir mejorando y manteniendo su aplicación de mensajería, que ya tiene en torno a 200 millones de usuarios en todo el mundo y que es considerada como una de las aplicaciones de mensajería más segura; sobre todo tras haberse negado a entregar las claves de cifrado a Rusia, lo que le ha valido su bloqueo en todo el país.

Esta plataforma de pagos utilizará tecnología blockchain, y busca situarse como una alternativa a Visa y Mastercard como plataforma de pago en busca de fomentar la economía descentralizada. El año pasado anunciaron planes para crear esta plataforma, así como también su criptomoneda llamada “gram”. Con esta plataforma buscan acercar las criptomonedas a sus usuarios, así como solucionar algunos de los fallos estructurales que tienen las grandes actuales como Bitcoin o Ethereum.

Telegram esperaba ingresar 1.200 millones de dólares tanto en la fase de financiación privada como en la pública, pero en la privada ya consiguieron alcanzar los 1.700 millones de dólares. En esta fase sólo podían participar inversores que tuvieran al menos 1 millón de dólares.

La estricta regulación sobre las ICO, uno de los posibles motivos para no lanzarla

Entre los motivos por los que Telegram ha podido cancelar la oferta pública se habla de que ya han recaudado suficiente dinero, o también de que el marco legislativo ha cambiado desde que se planeó. Además, lanzarse de manera pública puede llamar a un mayor escrutinio de las actividades de la empresa por parte de entidades regulatorias.

Las ICO no paran de recibir mensajes de alerta por parte de las autoridades debido a que muchas de ellas son estafas. De hecho, prácticamente la mitad de las criptomonedas del mercado han fracasadodonde sus creadores han dejado de soportar su red, anuncian pocas novedades, o simplemente dejar de tener actividad en redes sociales y huyen con el dinero recaudado. Y no hay manera de perseguir legalmente estas infracciones al ser un mercado no regulado.

Por ello, finalmente la fase de financiación se quedará en las dos rondas privadas que ya se han llevado a cabo. En la primera de ellas el multimillonario ruso Roman Abramovich llegó a invertir en la plataforma un total de 300 millones de dólares según se filtró, aunque él luego lo negó.

 

Fuente: WSJ | adslzone