Windows Media Player ha desaparecido misteriosamente tras una actualización
Este reproductor de vídeo por defecto lleva en el sistema operativo desde Windows XP, donde gozó de máximo uso. Actualmente, existen decenas de alternativas, siendo VLC una de las más utilizadas, así como también la propia aplicación de Películas y TV que está disponible con Windows 10, que es capaz de reproducir contenido en H.265 con una grandísima optimización.
Probablemente desde Windows 7 ya no uséis el Media Player, muy limitado en funciones y con otras muchas alternativas. Por ello, Microsoft está tanteando ya la opción de eliminar el Media Player de Windows 10, y éste ha desaparecido en la última actualización KB4046355. No tiene sentido seguir soportando un programa antiguo y que no pueden actualizar para añadir funciones, y quetampoco se puede utilizar en Windows 10 S ni está dentro de la UWP de Microsoft a la cual está portando todas sus aplicaciones.
Está desapareciendo, pero puede volver a instalarse
La actualización la están recibiendo los usuarios del programa Insider de Windows 10 con la versión 1709, y de momento no está llegando a los usuarios que tienen la versión estable. Esta tarde llegará un nuevo paquete de actualizaciones, y es probable que en éstas se incluya el que elimina el programa del sistema operativo.
Es extraño que Microsoft haya decidido eliminar de manera unilateral este programa sin avisar antes a los usuarios, ya que es probable que haya alguien todavía utilizándolo. A pesar de ello, el programa todavía se puede volver a añadir a Windows 10 a través del panel de Configuración – Aplicaciones – Aplicaciones y características – Administrar funciones opcionales, donde podemos añadirlo en la pestaña de Agregar una característica, o desinstalar el Windows Media Player. Si no lo usamos, podemos eliminarlo para ganar unos cuantos MB de almacenamiento.
En definitiva, encontramos dos motivos muy claros para eliminar esta función. El primero es que apenas nadie lo utiliza ya, siendo Películas y TV el reproductor predeterminado, y habiendo otras opciones mejores en el mercado gratuitas como VLC o MPC-HC, viniendo este último instalado con los códecs K-Lite, así como mejores reproductores de música, como AIMP.
La segunda es que la presencia de bloatware en un sistema operativo es algo de lo que suelen quejar muchos usuarios. Es innecesario instalar un programa que ocupa unos 60 MB y que nadie utiliza, de la misma manera que Internet Explorer está todavía preinstalado en Windows 10 a pesar de que todo el mundo usa Chrome o Firefox, y en menor medida Edge.
Fuente: adslzone
