Por más que pienses que aguantan para siempre, no es así. No cabe duda de que este tipo de producto es una parte fundamental de los móviles. Y más cuando la mayor parte de los smartphones actuales ya no incluye el adaptador de carga y lo tienes que comprar por separado. El problema está en su vida útil, que no es tan elevada como muchos se piensan.
¿Cuánto tiempo puede durar?
La vida útil del adaptador de carga rápida -que es la parte importante, y no el cable- puede variar en función de diferentes factores. Por ejemplo, si se trata de un modelo original de la marca y es de buena calidad, puede aguantar entre 3 y 5 años. Aunque, si se cuida correctamente, podrá aguantar más tiempo.
Ahora bien, si se trata de un modelo genérico o de baja calidad, la vida se reduce hasta 1 a 3 años. Estos suelen tener unos componentes más baratos, una menor protección térmica y eléctrica, lo que afecta a su durabilidad.
Y hay que tener en cuenta que la mayor parte de adaptador ya son de carga rápida. Soportan más calor, lo que acelera su desgaste en general. En definitiva, si es original y de una marca de calidad, puede durarte más de 5 años.
¿Qué factores influyen en que aguante más?
Hay diferentes aspectos que marcan la diferencia a la hora de que aguante más o menos tiempo. Y son:
- Si el adaptador es de calidad, por ejemplo, el original del fabricante de tu smartphone.
- El uso que se hace y si se calienta demasiado.
- Los picos de voltaje o cortes de luz pueden dañar su circuito interno.
- Si está conectado a la corriente todo el tiempo, provoca una mayor degradación de los condensadores.
- Si se te cae continuamente, ya que los golpes pueden dañar sus componentes internos.
Señales que indican que no funciona bien
Si quieres tener claro cuándo es el momento de comprar un nuevo cargador para tu smartphone, la clave está en conocer cuáles son las señales que te lo indicarán. Solamente es necesario conocer una serie de signos que dejan ver claramente que el adaptador ya no funciona bien. Así que fíjate en los siguientes detalles:
- Si el adaptador se calienta más de lo habitual cuando lo usas.
- Emite una especie de zumbidos, chasquidos, etc. En sí, ruidos extraños.
- Carga el dispositivo de manera intermitente o, por otra parte, hace que el móvil se cargue mucho más lento que antes.
- No usa la carga rápida.
Esta serie de signos dejan claro que es el momento de renovar el adaptador que usas para cargar a diario tu smartphone. Ahora bien, si vas a comprar un nuevo modelo, ten en cuenta que también hay una serie de consejos para que dure muchos años: usa un adaptador de calidad y original de la marca; no lo dejes conectado todo tiempo cuando no lo estés utilizando; evita conectarlo en zonas más calientas para que no suba de temperatura excesivamente todo el rato; y, por último, no lo conectes a regletas sobrecargadas o de baja calidad, es mejor que lo enchufes de forma directa a una toma de pared.
Fuente: adslzone
