A finales del año pasado, Apple puso el reemplazo de sus baterías a un precio ‘promocional’ que se mantendrá a lo largo de todo este año. Fue su respuesta inmediata ante el problema de ralentización de los modelos de iPhone más antiguos. Y es por eso que podemos ahora comprar la batería por 29 euros, mientras que antes eran notablemente más caras. Pero ¿y si ya la pagaste antes, a un precio superior? Entonces, puede que estés de ‘suerte’, porque Apple valora compensar a estos usuarios.
Aunque suena ya algo lejano, el problema de la ralentización de los iPhone antiguos ni mucho menos se ha terminado. La firma de Cupertino está siendo investigada en diferentes países –incluyendo los Estados Unidos-, y podría sufrir consecuencias al respecto. Por otro lado, Apple todavía tiene que lanzar iOS 11.3, que forma parte de sus compromisos con los usuarios respecto a este problema, y en esta versión al fin nos permitirán comprobar el estado de salud de la batería, y desactivar ese modo de ‘preservación inteligente’ cuando la batería esté degradada. Ahora, además, valoran compensaciones a los que ya compraron baterías.
Apple valora compensar a los que ya sustituyeron la batería de sus iPhone ralentizados
En este caso, los usuarios compensados serían única y exclusivamente los que cambiaron la batería de sus teléfonos inteligentes antes del descuento. Y aunque aún no han tomado una decisión al respecto, y probablemente lo conoceremos en los próximos días –si finalmente es que sí-, es evidente que Apple compensaría únicamente a los que hayan utilizado su servicio postventa. Es decir, a los que hayan cambiado la batería a través de la propia compañía de Cupertino, y no a través de terceros. Y tampoco conocemos de qué manera están valorando compensar a estos usuarios, pero previsiblemente con un descuento de compra en su tienda.
Durante los próximos meses seguiremos recibiendo noticias al respecto. Tanto por la llegada de iOS 11.3 que se producirá en las próximas semanas para intentar zanjar la polémica, como por el avance en la investigación a la que está siendo sometida Apple en diferentes países. En estas investigaciones –algunas de ellas- se contempla que haya sido una estrategia de obsolescencia programada enfocada a vender nuevos modelos y ‘renovar el parque’ de dispositivos móviles anteriores.
