Apple ha eliminado películas en Canadá sin avisar

Al parecer, Apple está eliminando películas de las bibliotecas de usuarios que las han comprado, y no lo está avisando ni está reembolsando el dinero. Así lo ha desvelado un tuitero llamado Anders G. da Silva en una serie de tweets durante esta semana.

El usuario escribió a Apple para quejarse de que le faltaban películas que había comprado. Apple le respondió diciéndole que esas películas habían sido eliminadas de la tienda canadiense porque habían perdido los derechos para seguir distribuyéndolas. Por ello, esas películas dejaron de estar disponibles en Canadá.

Por el hecho de quejarse, Apple le devolvió al usuario dos créditos para alquilar películas valorados en 5,99 dólares. Cuando el usuario se quejó y les dijo que no quería alquilar, sino que quería sus películas de vuelta, Apple intentó callarle ofreciéndole dos créditos de alquiler más.

Apple en realidad tiene la posibilidad de hacer esto, ya que ellos afirman que son simplemente una tienda, y no se responsabilizan de que puedas mantener o no el contenido. Así, estamos ante un alquiler a largo plazo hasta que ellos decidan que el contenido podrá ser eliminado. Y lo peor es que no devuelven el dinero.

Las plataformas online pueden borrar el contenido que quieran de las cuentas de sus usuarios

Por ello, actualizaron sus Términos del Servicio hace unos años para ofrecer almacenamiento en la nube de contenido comprado en la tienda, de tal manera que si se borraban del dispositivo donde estaba almacenado o de la tienda, podrían pasar posteriormente a descargarse y verse. Sin embargo, Apple nunca ha alertado a sus clientes de que esto podía pasar, y quienes borren el contenido que tienen descargado se la juegan a que no vayan a poder descargarlo otra vez.

Esta es la razón que esgrimen algunos usuarios de consola para no utilizar Steam en PC, ya que si desapareciese se irían con él todos los juegos (algo altamente improbable). Sin embargo, sí que ha ocurrido con otras tiendas como Amazon, donde en 2009 los usuarios que habían comprado 1984 y Animal Farm de George Orwell vieron cómo desaparecían de sus bibliotecas. El motivo fue que alguien los había vendido sin tener los derechos de los libros, y Amazon los eliminó. Más tarde reconocieron que esa no fue la mejor solución.

La propia Amazon también borró la cuenta de una clienta en 2012 con 43 libros de Kindle que había comprado, impidiendo que ésta pudiera acceder posteriormente a ellos.

En las condiciones de uso de todas las plataformas digitales se especifica que la compra puede ser eliminada en cualquier momento a discreción de la tienda. Por ello, el botón de “comprar” en las plataformas digitales no deja de ser un alquiler eterno que puede acabar cuando la plataforma diga.

 

Fuente: The Outline | adslzone