Y es que como os hemos venido comentando a lo largo de estos meses, una de las nuevas estrategias que estas firmas que luchan contra los usuarios que consumen contenidos sujetos a derechos de autor, es echar mano del miedo, pero del miedo en ocasiones llevado a un nivel extremo. Decimos esto porque las últimas campañas antipiratería de la industria del entretenimiento intentan dejar muy claro los peligros de estos actos, no solo contra nuestros propios equipos, sino contra nuestra seguridad personal y la de los seres cercanos.

Lo cierto es que la mayoría de los internautas actuales ya son los suficientemente maduros, y no hablamos de la edad como tal, sino de experiencia en la Red, para darse cuenta de que esto no son más que estrategias enfocadas a los más inexpertos en la mayoría de los casos, por lo que el éxito de estas campañas no ha sido muy elevado.

También es verdad que la violación de los derechos de autor, incluyendo subir, descargar, compartir o transmitir estos contenidos, es ilegal en la mayoría de los países, por lo que las partes interesadas deben hacer todo lo que esté en su mano para luchar contra esta piratería.

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La piratería entraña algún riesgo, pero no es tan peligrosa

Del mismo modo, la mayoría de las personas que hacen uso de estos contenidos, ya sean en forma de vídeos, música, libros, etc.; aceptan todo ello y entienden que, si son atrapados en estos actos, puede haber algunas consecuencias legales derivadas de todo ello. Pero una cosa es eso, y otra es que por usar una caja Kodi preparada, por ejemplo, podemos ver cómo nuestra casa sale ardiendo, o la seguridad de los más pequeños de la casa se pueda ver en peligro, como hemos podido leer en alguna ocasión estos últimos meses.

Todo comenzó cuando las organizaciones antipiratería comenzaron a decir que visitar portales torrent o plataformas streaming del mismo tipo, podría acarrear la infección por malware y el robo de todo tipo de credenciales personales, lo que también es un tanto exagerado en muchos casos. Y es que muchos consideran que, visto lo visto, hay titulares de derechos de autor que necesitan dejar de tratar a las personas como niños pequeños, o incuso como tontos.

En los tiempos que corren, seguro que casi nadie piensa que obtener o compartir los últimos estrenos, series de televisión y eventos deportivos, sea legal, pero de ahí a decir que sus vidas están en peligro por ello, hay una buena distancia.

 

Fuente: adslzone