Durante los últimos años, Google venido haciendo cambios en su estructura interna, y el año pasado se reestructuró y pasó a llamarse Alphabet, dentro de la cual Google es la más grande. Este movimiento tuvo como fin organizar mejor y más independientemente sus diversos proyectos, tales como los de telecomunicaciones que vamos a tratar a continuación.

Google Fiber

Este es el proyecto estrella de Google. Empezó en 2010 de pruebas en Estados Unidos, y dos años después vieron que era un modelo de negocio viable, y empezaron a ser una empresa de telecomunicaciones al uso. La ilusión de los americanos al ver una furgoneta de Google Fiber es la misma que tenemos los españoles cuando vemos a un operario metido en una arqueta próxima a nuestro edificio al lado de una bobina de fibra óptica. De momento la fibra óptica de Google está disponible en Estados Unidos, y a lo mejor en el futuro deciden lanzarse a más países.

El servicio que ofrece Google es una conexión de 1 Gbit simétrico, o 1000 Mbit, por 70 dólares al mes. Aunque este servicio era solamente de Internet, en marzo anunciaron que añadirán servicio de teléfono fijo.

Project Fi

Google lanzó el pasado abril Project Fi, el nuevo operador móvil virtual de la compañía de Mountain View. La novedad es que Google ha hecho acuerdos con operadores de red, de tal manera que la cobertura esté casi siempre garantizada al usar antenas de todos los operadores.

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En cuanto a los datos, hay que pagar una tarifa base de 20 dólares que incluye llamadas y sms ilimitados, y luego cada giga extra 10 dólares. Hay que tener en cuenta que devuelven los que no se usen, como hace Lowi en España. También Permite roaming internacional en más de 120 países, aunque la velocidad se reduce a 256 kbps.

Project Loon

Los globos aerostáticos de Google están pensados para dar acceso a Internet a zonas donde el cableado terrestre no llega.

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Estos globos aerostáticos hacen las veces de antenas de cobertura y repetidores, y se usan también para facilitar las comunicaciones en zonas afectadas por catástrofes naturales, de manera que los afectados tengan medios para comunicarse con conexiones que llegan hasta velocidades LTE. Para moverse por el aire, utilizan las corrientes de viento.

Sidewalk Lab

Este proyecto tiene como objetivo revolucionar y convertir las ciudades futuristas en algo del presente. La idea más popular, que está actualmente integrada en Google Maps, fue Flow. Esta idea tuvo como fin utilizar los datos que generan los smartphone para analizar el tráfico y los atascos. Gracias a esto, podemos disponer en nuestro teléfono de la información sobre la fluidez del tráfico en todo momento.

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Otra de las ideas de este proyecto fue LinkNYC, que consistió en convertir 7500 cabinas telefónicas de Nueva York en puntos de acceso Wi-Fi con velocidades de 1 Gbit.

Coches autónomos

Quizá el proyecto más loco de Google. Pasear por Silicon Valley es como viajar a una sociedad futurista. Se ven circular coches autónomos de Google junto con cientos de Tesla. Al segundo día no lo ves ni como algo raro. Hasta febrero de este año, ninguno de los coches que habían probado tuvo un solo fallo. Los accidentes hasta entonces habían sido causados por factores externos, como coches conducidos por conductores imprudentes.

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En febrero, uno de los coches autónomos Lexus RX450h de Google chocó contra un autobús a baja velocidad. El coche iba a hacer un cambio de carril al estar bloqueado por el que circulaba, y un autobús que el coche autónomo entendió que le iba a dar paso no se lo dio. El observador que va siempre controlando los coches autónomos dijo que él esperaba que el autobús le diera paso, al igual que interpretó el coche. Probablemente, el accidente habría ocurrido de haber ido conduciendo una persona.

De cara al futuro, Google espera desarrollar más coches, para lo que ha firmado un acuerdo con Fiat Chrysler para fabricar una flota de 100 furgonetas autónomas.

El sistema tiene una mecánica de funcionamiento similar a la de un humano. Va haciéndose preguntas y respuestas constantemente, de las que obtiene conclusiones de manera casi inmediata. Es capaz de analizar el entorno en un diámetro de 200 metros gracias a la gran cantidad de sensores que tiene el coche.

La clave de estos vehículos es que sean los únicos que haya en la carretera. Si todos los coches acaban interconectados entre sí, y pudiendo predecir el comportamiento mecánico de los mismos, sería posible imaginar un futuro sin accidentes de tráfico. En Estados Unidos mueren al año unas 32.800 personas. La gran mayoría de esas muertes se producen por fallos humanos.

 

Fuente: Telecoms | adslzone