Miguel Ángel Uriondo nos cuenta la última de la sangría de virtuales de Vodafone. Y es que los británicos no parecen tener demasiado interés en ser proveedores de red de otros operadores virtuales. Los precios que buscan imponer a los operadores que quieren ofrecer 4G a sus clientes son inasumibles para ellos y terminan buscando una mejor oferta (que siempre existe) en la competencia.

VODAFONE-USB-4G

En los últimos años hemos conocido varios casos de operadores móviles virtuales que han dejado las redes de Vodafone en busca de tecnología 4G. Uno de los más sonados fue el de Pepephone. La compañía, ahora en poder de MásMóvil, firmó un contrato con Yoigo para tener esta tecnología, pero la imposibilidad de acceder a las redes de Movistar en zonas sin cobertura, hizo que terminaran firmando con esta misma.

Lo mismo ha ido sucediendo con otras operadoras. Tenemos el caso de las cableras regionales con Euskaltel o R dándole una oportunidad a Orange. En los últimos días también hemos conocido que Telecable también se cambiaba a Movistar para tener acceso a sus redes 4G. Este cambio se producirá en los primeros meses de 2017.

Vodafone se queda sin virtuales por el 4G

De la misma forma que Pepephone, Euskaltel, R o Telecable, otra operadora móvil virtual ha decidido abandonar Vodafone por las dificultades para acceder al 4G. La británica BT, que lleva desde 2007 en España, ha confirmado su migración a Orange para empezar a utilizar las redes de los franceses a principios de 2017.

De hecho, Vodafone se ha quedado únicamente con un cliente virtual como es Eroski. El resto de los operadores a los que ofrece red son Lowi y Ono, marcas propias que no iban a tener un trato como el del resto, y Lebara, que tiene un acuerdo con Vodafone, pero a nivel europeo, por lo que no se puede analizar desde la misma perspectiva.

 

Fuente: adslzone