Así lo exponen después que Kaspersky lanzara acusaciones en contra de Microsoft de forma pública, por un posible abuso de posición dominante. Porque, según alegaban desde Kaspersky, Microsoft habría estado aprovechando su ‘ventaja’ en el sistema operativo Windows 10 para habilitar su solución de seguridad informática de forma automática cuando la licencia del antivirus está próxima a ‘caducarse’, o ya ha llegado la fecha de renovación y el usuario no ha actuado para renovarla. Algo similar a lo que ocurrió años atrás con los navegadores web, que llevó a Microsoft a una multa millonaria y la obligación de dejar escoger qué navegador web utilizar.

Ahora, Microsoft estaría colaborando con empresas dedicadas a los antivirus

Tras la queja de Kaspersky, todo apunta a que ahora Microsoft está colaborando de forma estrecha con esta y otras compañías dedicadas a la seguridad informática. De tal modo que, siguiendo las exigencias de la directiva de Kaspersky, se vele por la ‘igualdad’ de competencia entre las soluciones independientes –como sus propios antivirus-, y la suite de seguridad informática que integra Microsoft dentro de Windows 10. Lo que se desconoce, sin embargo, es si finalmente llegaron a iniciar un procedimiento legal en contra de Microsoft, o no.

Desde la compañía de Redmond no se han pronunciado al respecto, pero es un factor que beneficia a los usuarios. Microsoft sigue desarrollando Windows Defender como solución de seguridad ‘por defecto’, y como mínimo para su sistema operativo, pero la intención de los desarrolladores independientes, dedicados a la seguridad, es que el usuario tenga opción de escoger, y pueda ser informado de forma directa sobre las posibilidades que tiene a su alcance. Que no se informase sobre el período hasta la necesidad de renovar la licencia, por ejemplo, es algo que perjudica a los usuarios.

 

Fuente: adslzone